Renato Ibarra: Acuerdo con el club Atlas
El extremo ecuatoriano del América jugará cedido a préstamo por un año, con opción a compra, en el equipo de la ciudad de Jalisco, en el estado de Guadalajara; en México lo anuncian.
En América no hubo perdón para Renato Ibarra y el ecuatoriano definitivamente deja el equipo azteca, al menos una temporada, para vincularse a Atlas, club que se queda con los servicios del extremo derecho con una opción de compra.
Las disculpas públicas no alcanzaron para que el entorno de América perdone al imbabureño, acusado de violencia intrafamiliar en marzo, caso por el que fue detenido y luego separado de las Águilas.
América lo inscribió en su plantilla para disputar el torneo Apertura, y cuando parecía que volvería a vestir la divisa azulcrema, la presión social obligó a un cambio de planes.
Lo económico era una traba para encontrarle equipo al tricolor, cuya remuneración mensual alcanza los 80 000 dólares, valor por el que León
P
retiró la oferta por el tricolor.
Atlas se mantuvo en pelea y alcanzó un acuerdo por su cesión con América. El sueldo será asumido en partes iguales por los dos clubes, pero a un valor reducido del que Ibarra tenía con las Águilas.
Tras los chequeos médicos, el club de Guadalajara lo tendrá de manera oficial, en lo que, fuera de su situación judicial, es el fichaje más sonado en el mercado de la Liga MX.
Aunque es considerado una de las inversiones más valiosas de América, por su cotización de $4,5 millones, su salida se selló por incumplir una cláusula de su contrato por la que no puede estar involucrado en ningún escándalo que afecte la imagen de la institución.
El pasado 6 de marzo, Ibarra fue detenido por agredir a su esposa, Lucely Chalá. Luego de una semana de estar detenido y tras llegar a un acuerdo, en el que ella retiró la denuncia, fue liberado; sin embargo, América no lo reintegró.
Con su transferencia a Atlas, Ibarra deja la capital mexicana, pero mantiene la medida de presentarse ante autoridades judiciales cada inicio de mes, esto como parte de la sentencia tras haber sido culpado de violencia intrafamiliar. Además, debe seguir en un curso con perspectiva de género, que le impuso el juzgado. (D)