El comercio, el sector que más empleo pierde
Durante la emergencia sanitaria este sector ha reportado 3507 despidos.
Después de casi once años de laborar en la bodega de una compañía que importa y distribuye productos de cosmética, Juan M. se quedó sin trabajo una mañana de junio.
Recuerda que las personas que lo citaron explicaron que la empresa registraba una caída fuerte en sus ventas por la pandemia del COVID-19.
Para ese momento, Juan había laborado unos días en abril y el resto de mayo pasó suspendido. El día de la cita le comunicaron que estaba despedido y que una parte de su liquidación se la pagarían y otra quedaba pendiente.
Como Juan no estaba de acuerdo con lo que iba a recibir decidió con otros compañeros seguir un proceso laboral. Mientras, lleva varias semanas intentando buscar empleo.
Empresas y negocios ligados al sector comercial sintieron más fuerte el embate de esta crisis. En el centro y norte de Guayaquil es evidente la desocupación o cierre de locales que operaban antes de la pandemia. Y allí hubo mucha gente que se quedó sin trabajo.
En el sector del comercio al por mayor y al por menor y de reparación de vehículos se registran 3507 despidos en este periodo de la emergencia sanitaria, según datos del Ministerio del Trabajo. Esa cifra lo ubica como el sector donde más despidos hubo en este periodo de emergencia.
Dentro de los cinco ramos con más despidos aparecen las industrias manufactureras (3277), actividades de alojamiento y servicio de comidas (1278), construcción (1195) y actividades profesionales, científicas y técnicas (1190).
Si se suman sectores y todas las causales que han usado las empresas para separar personal, la cifra aumenta. Desde el 12 de marzo hasta el 25 de junio de 2020 se han registrado 213 674 actas de finiquito.
Pablo Arosemena, presidente de la Cámara de Comercio de Guayaquil, señala que en los 64 días de paralización productiva, el sector comercial absorbió el 50 % de las pérdidas en ventas. Datos de este gremio indican que entre los sectores más afectados estuvieron comercio de electrodomésticos, materiales de construcción, artículos de ferretería, partes y repuestos de vehículos.
Las restricciones de movilidad, los estragos del confinamiento y la falta de medidas para impulsar la reactivación hacen que sostener comercios y empleos sea una misión casi imposible, dice Arosemena.
En la industria manufacturera la situación ha estado igual de compleja. Unas empresas mandaron a parte de su personal bajo suspensión durante la emergencia sanitaria y otras tuvieron que reducir planilla.
La Cámara de Industrias de Guayaquil indica que Ecuador venía atravesando un panorama sensible, y lo ocurrido en marzo y abril sugiere un impacto económico mayor al que pudo haberse presentado en otros países, en especial para el mercado laboral.
"Al no existir en Ecuador la posibilidad de manejar contrataciones por hora que puedan irse ajustando al ritmo en cómo ha venido evolucionando la reactivación del consumo, las empresas se vieron forzadas a optar por la terminación de los contratos de trabajo", indica.
Entre enero y abril de 2020, las ventas a nivel nacional cayeron un 17 % respecto del mismo periodo del 2019, pero si se considera solo lo ocurrido en abril de este año, se evidencia una caída interanual en un 46 %, según este gremio.
Las fuentes de empleo también se vieron afectadas en las actividades de alojamiento y de servicio de comidas, donde los despidos alcanzaron importantes plantillas.
El abogado laboral Carlos Rubio señala que solo en el Grand Hotel Guayaquil hubo 80 personas que perdieron su empleo en este periodo.
Allí hay quejas por el uso de la figura de fuerza mayor. Él está patrocinando a grupo de 20 extrabajadores que tenían varios años laborando y que reclaman liquidaciones como despidos intempestivos.
Otro grupo ha iniciado diálogos con la parte patronal, con la intervención del Ministerio del Trabajo. (I)