Luciano Koenig está entre los 10 mejores fotógrafos del año 2020 según comunidad Creat ivepool
Este año ha sido de lo más interesante para los fotógrafos, que se han visto obligados a pasar buena parte del tiempo en casa, al menos durante épocas de mayor alerta.
¿Qué han hecho estos profesionales con menos estímulos del mundo exterior?, se preguntó el portal Creativepool.com, comunidad de la industria creativa que conecta a marcas, agencias y buscadores de talento con diseñadores gráficos, diseñadores 3D, diseñadores web, directores de arte, ilustradores y fotógrafos, para hacer conocer su trabajo.
La respuesta, dicen, es que todo este sector sufrió en 2020, pero algunos fueron capaces de reinventar su arte ajustando, una vez más, el ángulo de su lente. Así, decidieron elegir a los diez fotógrafos más destacados del año.
Entre ellos está el ecuatoriano Luciano Koenig Dupont, en quien Creativepool asegura encontrar algo que “no se ve muy seguido”: un estilo brillante e inconfundible. “Luciano es un fotógrafo (ganador de múltiples premios internacionales) con extensa experiencia y un impresionante cuerpo de trabajo, que va del retrato a la publicidad y más allá. Y por estas imponentes fotografías, se ve que es un increíble director de arte”.
Reinvención acelerada
Creador y editor de la revista digital Like Creativity, Koenig cuenta cómo fue su propia reinvención en medio de confinamientos y toques de queda. “En mi estudio, junto con mi esposa Andrea, decidimos utilizar el tiempo para generar nuevos proyectos que no están directamente relacionados con la fotografía, pero sí con la dirección creativa y artística, que es la columna vertebral de nuestro trabajo”. La tecnología y las nuevas formas de comunicación en pandemia aceleraron el proceso para generar nuevas conexiones y proyectos, dice, y añade: “No podemos sentarnos a esperar a ver qué pasa más adelante, tenemos que salir a hacer que nuevas cosas pasen”.
Creador y fotógrafo del proyecto multidisciplinario We
Are Soldiers Project, con el que ha publicado tres libros de fotografía: Black Book, Innocence Test y Macho, Koenig está en la preproducción del tomo de fotografía experimental Un rayón en los ojos, efímero y fugaz, junto con el escritor argentino Ángel Becassino.
En estos meses también han surgido posibilidades de proyectos artísticos que involucran a profesionales de varios países, armado de los recursos que considera imprescindibles, “la creatividad, el enfoque y la determinación para llevar adelante los proyectos. El resto son solo aspectos a los que hay que adaptarse”.
Siguiendo el camino de la adaptación y el aprendizaje
En el año 2020 hubo algo preciado, comenta Koenig: momentos para aprender nuevas habilidades para las cuales, antes de la pandemia, “no nos hubiésemos tomado el tiempo necesario. Y por el lado humano, fue un gran momento para reconectarnos con las cosas más esenciales”.
Koenig piensa que en cualquier trabajo creativo la reinvención es constante; la pandemia solo acortó y aceleró esos procesos. “Cada creativo o profesional es un mundo y deberá encontrar los caminos para cambiar o adaptarse a los tiempos que vienen”.
Una de las enseñanzas, reflexiona el fotógrafo, es que “un día estamos y al otro no”. Desde lo humano el desafío es volver a conectarnos con lo esencial, los afectos. “Y por el lado profesional, debemos llevar a cabo los proyectos que tenemos en mente; el día menos pensado será tarde”.
«La creatividad, el enfoque y la determinación son los recursos imprescindibles».
«Realicemos los proyectos en mente; el día menos pensado será tarde».