Los Chamorro, dinastía política y periodística hostigada en Nicaragua
Miembros de la familia están detenidos por investigaciones basadas en leyes hechas a la medida del régimen de los Ortega. Cristiana Chamorro, quien se perfilaba como favorita para las elecciones, también fue aprehendida.
Hay familias que solo con nombrarlas se hace referencia a un país y ese es el caso de los Chamorro para Nicaragua.
Con presidentes, políticos, periodistas y empresarios en su haber, esta familia ha sido parte protagonista de eventos por dos siglos en el país. Hoy son el objetivo político del gobierno del presidente Daniel Ortega y su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, quienes quieren acabar con cualquier sector crítico. Las acciones contra ellos y otros actores han hecho que voces internas y externas ya comiencen a calificar de dictadura a los líderes del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
La familia ha sido en su mayoría de línea de base conservadora, aunque en el ocaso del poder de la familia Somoza (gobernaron
El primer Chamorro en la Presidencia de Nicaragua fue Fruto Chamorro Pérez.
por 45 años) una parte se alió con el FSLN para sacarlos del poder.
Siete personajes de esta familia han llegado a la Presidencia. El primero fue Fruto Chamorro Pérez (1854) y la última fue Violeta Barrios de Chamorro, viuda de Pedro Joaquín Chamorro, director del diario La Prensa, quien fue asesinado en los últimos años de los Somoza (1978). Él era una figura clave en la oposición y su muerte hizo que creciera el rechazo al Gobierno y el apoyo a cualquier figura que reemplazara a los Somoza.
Así lo recuerda Mauricio Velasco.
Él vivió su adolescencia en Nicaragua, en la década del 60, y siempre ha mantenido el contacto con ese país. “(Los Chamorro) son una familia histórica que ha estado presente en todo el acontecer de ese país, en lo político, social y hasta religioso“, dice Velasco, quien fue diplomático hondureño y ahora vive en Ecuador.
Y evoca que en Nicaragua era común oír la frase “después de Somoza cualquier cosa”.
Eduardo Enríquez, jefe de redacción de La Prensa, dice que si bien el diario apoyó al sandinismo con el fin de sacar del poder a Somoza, desde 1980 se alejó y fue crítico. “La familia (Chamorro) siempre ha estado presente en la vida política del país, pero podemos decir que la mayor parte del tiempo desde la oposición”, apunta y agrega que de los Chamorro Barrios, Carlos Fernando y Claudia simpatizaron con el sandinismo, mientras que Cristiana y su esposo, Antonio Lacayo (ministro), así como Pedro Joaquín hijo, estuvieron al lado de su madre cuando en la Presidencia marcó diferencias con el sandinismo.
Actualmente Cristiana y Pedro Joaquín están detenidos y su primo Juan Sebastián Chamorro, además de otros cuatro precandidatos. Carlos Fernando está en el exilio. Todos han sido detenidos o acusados de lavado de dinero o “traición a la patria”, al amparo de una ley que entró en vigor en diciembre pasado que castiga con cárcel a quienes promuevan bloqueos económicos y la injerencia extranjera, indica AFP.
También está detenido el primo de Cristiana, Juan Lorenzo Holmann Chamorro, gerente general de La Prensa.
“Es una represalia contra las intenciones de Cristiana de postularse a la Presidencia. Es una decisión del Gobierno de acabar con toda la oposición. Y obviamente también contra el periodismo independiente”, dice Enríquez, quien agrega que la sede de La Prensa está tomada, en una “etapa en la que la dictadura está acabando con los vestigios de libertad que existían y probablemente se va a imponer y consolidar porque los nicaragüenses no pueden oponerse a esta dictadura que ante cualquier expresión contraria responde con cárcel o con plomo...”.
En tanto, Elvis Rugama, activista estudiantil en las protestas y ahora exiliado, comenta que la familia Chamorro “es una estirpe heterogénea, no lineal, que asume su liderazgo y roles sociales desde distintas posiciones”. “Han ejercido mucho el periodismo y esto es lo que más les ha valido y más les ha traído consecuencias, pues han asumido un rol crítico a los diferentes sistemas, regímenes, dictaduras, incluso a familiares que han ostentado poder”, dice Rugama, quien agrega que muchos en esta familia se alejaron del sandinismo y por sus críticas han sido perseguidos desde que Ortega volvió al poder en 2007, especialmente Carlos Fernando Chamorro Barrios.
Según él, la persecución contra ellos busca impedir que generen acuerdos y negociar entre los distintos sectores de oposición, y convertirse en una amenaza para el régimen.
El ecuatoriano Michel Leví,
Miembros de la familia han sido detenidos al amparo de ley de vigencia reciente.
coordinador del Centro Andino de Estudios Internacionales, comenta que la familia quedó marcada por el asesinato de Pedro Joaquín Chamorro, quien era un fuerte crítico de los Somoza a través de La Prensa. Además, la familia fue parte de los que lograron que el entonces presidente de EE. UU., Jimmy Carter, tome acciones más duras contra Anastasio Somoza Debayle, el último de esa familia en el poder.
El analista añade que la familia Chamorro vuelve a ser víctima de regímenes totalitarios en su país, tal como en la época de los Somoza. (I)