FIGURAS DEL CORREÍSMO ASILADAS
Rafael Correa Delgado, expresidente entre el 2006 y 2017. Reside en Bélgica, en donde tiene la condición de refugiado, pues es solicitado por la justicia de Ecuador, sentenciado por cohecho en el caso Sobornos y otros procesos legales en ciernes.
En tanto, él está en Europa, sus coidearios políticos se asilaron en México. Entre estos, dirigentes del movimiento Revolución Ciudadana (RC) que fueron asambleístas y ministros, como Gabriela Rivadeneira y Ricardo Patiño, Luis Molina, Soledad Buendía y su esposo, Edwin Jarrín; Carlos Viteri y su esposa, Tania Pauker, que salieron de Ecuador investigados por su participación en las protestas sociales e indígenas del 2019 en contra del expresidente Lenín Moreno Garcés.
Viviana Bonilla y Walter Solís, exministros, ella con asilo y
México le ha dado asilo a varios dirigentes de la Revolución Ciudadana.
él refugiado en México, por el caso Sobornos.
La exministra María de los Ángeles Duarte, que se asiló en la Embajada de Argentina en Venezuela, en el 2023, donde están también los autoexiliados hermanos Fernando y Vinicio Alvarado, requeridos por la justicia.
El exsuperintendente de Comunicación Carlos Ochoa, que obtuvo un carné de refugiado en México en 2019; previamente, solicitó asilo político en Bolivia. En Ecuador enfrentaba una acusación por falsificación ideológica.
También el expresidente del IESS en el periodo de Correa Ramiro González buscó refugio en Perú, investigado por defraudación tributaria.
En tiempos de revoluciones y dictaduras también se pidió asilo. Por ejemplo, el expresidente Carlos Arroyo del Río se asiló en Colombia en el marco de la Revolución del 28 de Mayo o La Gloriosa, como se la conoció.