Argentina afrontó una gran movilización universitaria contra el gobierno de Milei
Estudiantes, docentes, personal universitario y organizaciones sociales se manifestaron en contra de los recortes en la financiación de la universidad pública decretados por Milei.
Argentina afrontaba ayer una gran movilización de docentes, estudiantes y personal universitario contra de las políticas de ajuste del gobierno de Javier Milei y en defensa de la enseñanza pública superior.
A lo largo y ancho de todo el país hubo marchas convocadas por sindicatos estudiantiles, a quienes después se sumaron los docentes, y posteriormente respaldadas por organizaciones sociales, sindicatos y fuerzas políticas, contra los recortes en la financiación a la universidad pública decretados por el libertario Milei.
Aunque el Ministerio de Capital Humano anunció a última hora del lunes lo que, días atrás, presentó como un acuerdo con el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), el depósito de 10.075 millones de pesos (unos 11 millones de dólares) por el 100 % de los gastos de funcionamiento de las universidades nacionales, la marcha se dio.
“Nosotros somos superrespetuosos de la expresión que tengan los jóvenes, los estudiantes (...) pensando que eso les puede ayudar a tener un futuro mejor", dijo el portavoz presidencial, Manuel Adorni, en su rueda de prensa en la Casa Rosada (sede estatal).
No obstante, el Ejecutivo consideró que “el tema presupuestario está saldado”, por lo que, agregó Adorni, “esto lo transforma claramente en una marcha política”.
Con esto se refirió a la presencia anunciada de políticos peronistas como el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Áxel Kicillof, y el exministro de Economía y excandidato presidencial Sergio Massa; del líder de la Unión Cívica Radical (UCR, centro), Martín Lousteau; así como la Confederación General del Trabajo (CGT), principal central sindical del país, y movimientos piqueteros o de izquierda.
Desde las 15:30 (hora local) los manifestantes se concentraron junto al Congreso, para recorrer los 2 kilómetros que lo separan de la Plaza de Mayo, donde está la Casa Rosada.
En coincidencia con el Día Internacional del Libro, este 23 de abril se pidió a los manifestantes que, en lugar de proclamas políticas, porten un libro en alto en defensa de la cultura, sector también muy cuestionado y con bastantes recortes en su financiación desde que el gobierno de Milei asumió el poder en diciembre.
Uno de los asuntos más controvertidos es si el Gobierno aplicará el “protocolo antipiquetes”, implementado por el Ministerio de Seguridad poco después de asumir el Ejecutivo y que impide el corte de la vía pública con una marcha.
El Ejecutivo consideró que “el tema presupuestario está saldado”, dijo Adorni.
La marcha coincidió con el Día Internacional del Libro, cumplido el 23 de abril.