El objetivo es crear conciencia sobre los efectos nocivos del ruido...
similar o mayor al de la polución atmosférica y contaminación de alimentos por metales pesados como el plomo sobre nuestra salud.
Es necesario recordar que los sonidos no deben superar los 65 dB durante el día y no exceder los 30 dB durante la noche. Con 75 dB el ruido es molesto y se transforma en dañino y peligroso cuando supera los 120 dB. El alto volumen de los parlantes puede provocar tinnitus y dolor, siendo su límite de tolerancia de 20 minutos al día, en caso de ser permanente provoca daños irreversibles a la salud.
Las autoridades de salud, medioambiente, municipales y parroquiales están en la obligación de proteger a la población contra este contaminante auditivo. A su vez la comunidad debe exigir la aplicación de leyes y reglamentos. Es importante destacar que sembrar árboles puede ser una buena medida contra el ruido, ya que además de purificar el aire es el mejor amortiguador natural contra este letal contaminante. (O) Francisco Plaza Bohórquez, analista de temas y políticas de salud, Guayaquil por el buen desempeño de este tribunal.
Los políticos, y de manera expresa los asambleístas, no solo de este último periodo legislativo, sino de varios otros, de una forma incongruente, se cambian de bancadas y tiran al traste la ideología que proclamaban cuando se promocionaban para llegar a una curul. Luego ya en recinto esa misma ideología la convierten en una melcocha, la cual amasan y estiran a más no poder. A lo anterior se le llama “cambio de camiseta”, ya que a pesar de haber sido designado como representante del pueblo por un determinado partido político, al que abandona con cualquier inconsistente pretexto, el elector, que depositó su confianza, su voto y sufragio para que sea elegido, queda como un perfecto muñeco porfiado, que tras ser golpeado siempre vuelve a su misma posición.
Camisetazo, esa es la parte inmoral de los políticos corrompidos que llegan a la política para deprimir el sentimiento patriótico, ya que si así actúan las llamadas autoridades de la patria, ¿qué podemos esperar del respeto y de las consideraciones en el concierto de las naciones? (O) César Antonio Jijón Sánchez, técnico de mantenimiento, Daule