Madonna convocó en cierre de su gira mundial a 1,5 millones de personas en Río de Janeiro
La Reina del pop puso fin a la gira de conmemoración de sus 40 años de carrera, que incluyó sus éxitos Like a virgin, Vogue, Holiday, Like a prayer y La isla bonita.
En 1987, Madonna cantó ante 130.000 personas en París, con solo cinco años de carrera, en lo que hasta hoy es el concierto en Francia con la mayor concurrencia de público.
La noche del sábado pasado, en Brasil, en el cierre de su gira The Celebration Tour, la Reina del pop convocó a 1,5 millones de personas en Río de Janeiro, en un concierto gratuito efectuado en la playa de Copacabana, al que regaló de entrada el tema Nothing really matters (1998), considerado una de sus canciones más personales.
Madonna apareció en el escenario de 812 metros cuadrados vistiendo un quimono negro sobre ropas cortas también oscuras y fue ovacionada por sus miles de admiradores, algunos de los cuales esperaron casi doce horas para garantizarse los lugares más próximos a la tarima.
El público estaba muy animado, ya que el pinchadiscos estadounidense Diplo ofrecía una selección de clásicos del funk, el género nacido en las favelas de Río de Janeiro.
Madonna puso fin a la gira de conmemoración de sus 40 años de carrera, que incluyó sus éxitos Like a virgin, Vogue, Holiday, Like a prayer y La isla bonita. En Copacabana la acompañaron los artistas brasileños Anitta y Pabllo Vittar.
El concierto fue histórico para Madonna, quien nunca había cantando para un público tan numeroso. La estadounidense podría superar la marca que lograron los Rolling Stones en febrero de 2006, cuando atrajeron a 1,5 millones de personas también a la playa de Copacabana.
La masiva movilización provocada por Madonna, especialmente de mujeres y del público LGBT, obligó a las autoridades a cerrar prácticamente todos los accesos vehiculares del barrio de Copacabana.
En Copacabana, brasileños Anitta y Pabllo Vittar acompañaron a Madonna.