Incremento inusual de venta petrolera por falta de refinación y crudo liberado
Situación petrolera es compleja por falta de inversión. Se pide cambiar posturas sobre actividades extractivas.
La producción y la exportación petrolera registra movimientos inusuales. Mientras la producción crece de manera modesta, la exportación sube fuertemente y la refinación se repliega.
La producción ha crecido 5,6 % en el primer trimestre, al pasar de 460.600 barriles diarios en promedio en el 2023 a 486.400 barriles en el 2024.
En cambio, la exportación ha crecido de forma sorprendente un 23,2 %. La exportación en el primer trimestre del 2023 fue de 26,4 millones de barriles, pero subió a 32,6 millones de barriles en 2024. Aunque en enero esa cifra fue mucho mayor, pues estuvo en 39,4 %. Así lo revelan los datos del Banco Central del Ecuador.
Pero las cifras también dejan ver un panorama preocupante sobre los datos de refinación. En el primer trimestre del 2023 se había refinado 13,8 millones de barriles y, en cambio, en 2024 bajó en 12,7 % (12 millones de barriles). La refinería que más problemas presentó con una caída de refinación del 22 % fue la de Esmeraldas.
Sería de esperar que tras la caída de la refinación, la importación hubiese incrementado, pero este rubro más bien cayó de 15,9 millones de barriles en el primer trimestre del 2023 a 14,6 millones de barriles en 2024, una baja de 8,7 %.
Alberto Acosta Burneo, editor de Análisis Semanal, comenta que estos movimientos, sobre todo en enero, han sido atípicos. La producción ha estado en niveles planos, pero subió la exportación, pues por problemas en la refinación se dejó de consumir crudo para el procesamiento interno.
Entre tanto, Mónica Heller, presidenta de la Cámara de Comercio de Quito, asegura que como gremio vieron sorprendidos los resultados de producción en comparación con la exportación. Pero más allá de los números, ven que el precio de commodities ha sido lo que ha sostenido la economía, junto con las remesas y el apoyo de organismos internacionales.
Petroecuador explica que el incremento de la exportación se debe a varias razones. Una de ellas es que desde enero se ha liberado un promedio de 3’600.000 barriles mensuales para la comercialización de crudo ecuatoriano en el mercado spot, una vez que en diciembre culminaron tres contratos a largo plazo que mantenía con Shell Western Supply and Trading Ltd., PTT International Trading PTE Ltd. y Petrochina. En total son diez cargamentos.
Así se ha logrado colocar más crudo para las licitaciones en el mercado internacional y se han planteado nuevas estrategias de comercio internacional para obtener mayores beneficios para el Estado, acorde con los precios de mercado.
También se cuenta con disponibilidad de crudo debido a los cronogramas de mantenimientos y condiciones de operación de las refinerías.
En todo caso, Acosta Burneo advierte que el panorama del sector petrolero se caracteriza por tener una inversión privada completamente detenida. Por ejemplo, no se conoce el avance de la ronda intracampos. Este proceso estuvo demorado por el cambio de autoridades. Previamente hubo cambios en Finanzas que demoraron los procesos. En definitiva, sigue la demora. “No se logra destrabar la inversión en el sector petrolero”.
Considera clave lo que pase con el Yasuní ITT, la ronda intracampos, acelerar permisos que están represados, para que así las empresas privadas puedan generar mayor inversión.
También comenta que en este sector se ha dado un hallazgo interesante, pues se conoció que el 2 de mayo la empresa PCR (Argentina) ha descubierto un promisiorio campo en el sector suroriente.
Para Mónica Heller, en cambio, al haber un repunte de los precios, de petróleo y oro, Ecuador debería apostar a la minería formal y responsable para generar recursos. Ver la posibilidad de continuar con la explotación del ITT. Cree que el país debe reconsiderar sus posturas frente a las actividades extractivas. Explica que se vienen pagos y cumplimiento de atrasos desafiantes. El país tiene que pagar este año $ 2.190 millones en intereses externos y $ 1.747 millones en amortizaciones. Tiene un déficit de $ 5.900 millones del 2023. “Esto nos deja con $ 9.851 millones en obligaciones adquiridas adicionales del presupuesto”. (I)
La producción petrolera creció 5,6 %, mientras que la exportación un 23,2 %.