INFLUENCERS NO EXISTE EL PERFECTO
En las últimas semanas las noticias internacionales han dado a conocer cómo algunos dueños de negocios han tenido problemas con personajes mediáticos de redes sociales, más conocidos en el mundo del marketing como influencers.
El más comentado fue el de un hotel de lujo en Dublín que anunció que veta a los influencers después de que una joven de 22 años le pidiera cinco noches gratis a cambio de promoción en sus redes sociales. La chica es Elle Darby, quien tiene 100 mil seguidores tanto en Instagram como en YouTube.
Ella abordó así al hotel y fue lo que desencadenó todo el problema: “Mi pareja y yo estamos planeando ir a Dublín para pasar el fin de semana de San Valentín, del 8 al 12 de febrero, y conocer la zona. Mientras buscaba lugares para hospedarme, encontré su impresionante hotel y me encantaría enseñarlo en mis vídeos de YouTube y en mis historias y publicaciones de Instagram”.
La cruda respuesta del gerente del establecimiento provocó todo un caos. “Se necesitan pelotas para enviar un correo electrónico como ese”, le respondió en un correo lleno de reproches que se hizo viral.
El caso se ha extendido a España, en donde la mayoría de los hoteles han prohibido este tipo de alianzas.
En Ecuador el caso no ha llegado a estos extremos porque se ha manejado más a requisito de las marcas que por el interés de estos personajes públicos en figurar o participar en campañas.
Para Natalia Macías, country manager de la agencia de Marketing Performance, en nuestro territorio “sí existen los influencers. Puede ser una persona con un canal en YouTube, perfil de Instagram o página de Facebook pero que le guste crear contenido, y que con esto influya en la gente”, explicó. “Y usar su trabajo en una campaña sí puede traer réditos para una empresa, sean ventas, views o likes, depende de lo que se busque”, acotó.
Pero nada es perfecto: no hay quien encaje completamente en este ideal de persona para ser imagen de una marca o producto. Aunque muchos famosos nacionales no lo entiendan. Basta con ojear las cuentas de Instagram, conocido también como el escaparate mundial, de los chicos de los reality shows locales que promocionan más de un artículo en sus cuentas sin preparar la estética de este o cuidar la suya.
Lo que sí se tiene claro, según la experta, son cinco valores a considerar para establecer a un personaje como impulsador (ver cuadro).