EL LEGADO DEL DIABLO
He aquí una de las buenas películas del año y decididamente la mejor de este julio. El legado del Diablo es una obra maestra del género, muy valiosa, y quizá más que Un lugar en silencio.
Personalmente quisiera escribir menos para que ustedes experimenten este largometraje con total curiosidad, tal como en nuestra niñez escuchábamos las ‘ penaciones’, esos cuentos macabros narrados por la servidumbre o las tías mayores. Entonces el miedo nos acercaba más y más a nuestros padres en la sala oscura donde empezaban las historias.
Pero hay que escribir y empecemos aplaudiendo a su director y guionista: Ari Aster. Este no ha olvidado los viejos moldes del terror, pero los ha pulido en tal forma que se ven nuevos, creados por su mente. Los fantasmas no aparecen enseguida, pero se sienten y cuando presentan… el shock se apodera del espectador. La hábil mezcla del sonido remata las emociones, la fotografía y su dirección artística elevan la categoría del filme.
Toni Collete está genial. Su rostro va reflejando la angustia, el temor que va sintiendo al pensar que la madre ha vuelto para forjar la decadencia familiar. Ella, aunque no son buenas las comparaciones, tiene el pulso artístico de Ellen Burstyn en El exorcista ( 1973) y bien podría merecerse una postulación al Óscar, ya que su poder dramático es poco usual. Milly Shapiro es otro acierto, con ella el personaje adquiere más fuerza por la mirada, por los ojos de la pequeña actriz. Alex Wolf es talentoso y desarrolla su ‘ Peter’ como quien empieza a experimentar una pesadilla. Gabriel Byrne brinda una sólida actuación.
El filme abre ( en Utah) en los momentos que dan sepultura a Ellen, una mujer de 78 años. Su hija Annie brinda su elegía. Más tarde abrirá cajones y encontrará una nota que dice: “Nuestros sacrificios palidecerán frente a la recompensa”.
La película ha comenzado. Y ustedes prepárense para admirar sombras y silencios, ansiedad y terror. A admirar el control que Ari Aster tiene para cada una de las secuencias. No se la pierda.
Notal al margen. Toni Collette fue nominada al Óscar en 1999 por su actuación en Sexto sentido. Era la madre del niño ( Haley Joel Osment) que decía: “Veo muertos”. ¿ Se acuerdan?