Casas de acogida esperan la transición
Una alternativa es que estos centros pasen a la Secretaría de la Gestión de la Política.
QUITO • Existen dos lugares a los que pueden acudir las mujeres víctimas de violencia: los centros de atención y las casas de acogida, donde pueden quedarse con sus hijos de ser necesario.
Desde 2008, después de la creación del Plan Nacional de Erradicación de la Violencia de Género hacia Niñez, Adolescencia y Mujeres, comenzaron a recibir financiamiento del Estado. Primero como proyectos de inversión y desde hace dos años como parte del gasto corriente.
Los centros de atención y las casas de acogida, en su relación con el Ejecutivo, iniciaron bajo el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) hasta 2012, el Ministerio del Interior durante alrededor de tres meses y terminaron en el Ministerio de Justicia.
Ahora serán traspasadas a otra Cartera, una vez que el presidente, Lenín Moreno, decidió suprimir la de Justicia. En una reunión mantenida el pasado miércoles con la viceministra de Justicia, Lucy Blacio, se anunció que iniciará un proceso de transición. Ahí se planteó como alternativa el traspaso a la Secretaría de la Gestión de la Política.
Existen dos lugares a los que pueden acudir las mujeres víctimas de violencia: los centros de atención y las casas de acogida, donde pueden quedarse con sus hijos de ser necesario.
Desde 2008, después de la creación del Plan Nacional de Erradicación de la Violencia de Género hacia Niñez, Adolescencia y Mujeres, comenzaron a recibir financiamiento del Estado. Primero como proyectos de inversión y desde hace dos años como parte del gasto corriente.
Los centros de atención y las casas de acogida, en su relación con el Ejecutivo, iniciaron bajo el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) hasta 2012, el Ministerio del Interior durante alrededor de tres meses y terminaron en el Ministerio de Justicia.
Ahora serán traspasadas a otra Cartera, una vez que el presidente, Lenín Moreno, decidió suprimir la de Justicia. En una reunión mantenida el pasado miércoles con la viceministra de Justicia, Lucy Blacio, se anunció que iniciará un proceso de transición. Ahí se planteó como alternativa el traspaso a la Secretaría de la Gestión de la Política, confirmó Geraldine Guerra, coordinadora de las casas de acogida, quien estuvo en la reunión.
En esa cita, convocada después de que organizaciones sociales declararon emergencia social por la eliminación del Ministerio de Justicia, las autoridades señalaron que se articulará “la continuidad de la atención a víctimas de violencia contra las mujeres”, según un mensaje publicado en la cuenta de Twitter de la institución.
Pese a esto, la preocupación se mantiene porque no existen detalles de cómo se realizará el traspaso y cómo se hará el pago del presupuesto de este año. Anualmente, las casas de acogida y los centros de atención reciben $2’000.000, de los cuales $86.000 son para cinco casas, y la diferencia se destina para cinco centros de atención.
Este año, el Ministerio ha realizado únicamente el pago de tres meses (abril, mayo y junio), por lo que la viceministra se comprometió al pago de julio hasta la anterior semana. También discutieron firmar una adenda para los pagos de agosto a diciembre y definir un plan para la deuda del primer trimestre del año.
Trabajo
Las casas de acogida financiadas por el Estado están en Quito, Guayaquil, Cuenca, Francisco de Orellana y Lago Agrio. Tienen una capacidad máxima de 45 personas, para cumplir con los estándares internacionales y, al momento, están casi al límite, confirmó Guerra.
Las mujeres pueden ir allá con sus hijos, sin importar cuántos, y permanecer por el tiempo que necesiten. La permanencia es indefinida. Hay casos de madres adolescentes que se han quedado allí por años. El problema actual, con la deuda del Ministerio, es que no se puede pagar a los seis profesionales que hay en cada casa y tampoco cubrir la alimentación para las mujeres y sus hijos. Así lo confirmó Amparo Peñaherrera, coordinadora de la Casa Amiga de Lago Agrio.
Por otro lado, en el país funcionan 21 de centros de atención, en ellos se atendieron 22.000 casos en 2017, señaló Miriam Loor, directora del centro Nuevos Horizontes en Portoviejo. La característica de estos puntos es la prevención. Su atención es ininterrumpida. Las mujeres reciben asesoría y tratamiento sicológico dependiendo de lo que necesiten.
Hoy, las organizaciones sociales tendrán una segunda reunión para acordar una propuesta que se presente al Ejecutivo. Allí debatirán sobre las casas de acogida y los centros de atención. También se definirá la presentación de una medida cautelar para frenar la eliminación del Ministerio, hasta que esté claro qué va a pasar con todas las competencias que maneja.
Cada centro de atención integral tiene cuatro profesionales mínimo: un abogado, un trabajador social, un administrador y un sicólogo.