Se alistan para la llegada del invierno
En el cantón Ibarra, las zonas consideradas vulnerables son intervenidas para evitar afectaciones con desbordamientos de agua producto de la temporada invernal que se avecina. Las labores iniciaron en los primeros días de septiembre a fin de adelantarse a
IBARRA• De acuerdo a las estimaciones meteorológicas por parte del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), para los siguientes meses el invierno se acentuará en la región. Las autoridades pertinentes toman las previsiones necesarias en donde se ubican las quebradas al sur de Ibarra y han iniciado con una limpieza integral para evitar los desbordamientos e inundaciones.
Como antecedentes las quebradas secas denominadas Las Flores, Seca y Rumipamba, las cuales son un inminente peligro en tiempo de inverno, desde la unidad de áridos y pétreos de la municipalidad en coordinación con personal de las concesionarias mineras ingresaron a las zonas altas del relieve a fin de cumplir un barrido encausar el agua sin que pueda correr con materiales que taponan las alcantarillas en el recorrido. Inspecciones Magdalena Segura, principal de la unidad que controla el tema pétreo, informó que las labores iniciaron en los primeros días de septiembre a fin de adelantarse a la época invernal. Las tareas integrales para estos días llegarán a la parte baja de la principal quebrada de la ciudad donde aún falta despejar los múltiples materiales que se arrasan con las lluvias.
Tras las intensas precipitaciones que se registraron en abril pasado la limpieza de las quebradas serían fundamentales. La maquinaria y mano de obra municipal recogió más del 60% de escombros que fueron depositados en los recipientes móviles para llevarlos hasta el depósito general de basura, mientras que la arena, piedras existentes propias de las quebradas son arrinconadas hacia los costados para evitar fisuras en los flancos, y al mismo tiempo el cauce continúe con su trayecto sin obstrucciones.
Las denominadas piscinas al momento están despejadas, aquellas sirven de colector para minimizar el acumulamiento de remanentes para evitar los desbordamientos como ocurrieron en el 2011.
En la parte urbana de igual manera se asentarán los trabajos en especial en el canal de Ajaví, lugar que recepta el caudal desde las faldas del Imbabura.