Abraham Calazacón, la figura del gobernador vitalicio
Fue un gran dirigente, quien hizo mucho por el reconocimiento de su nacionalidad ante la sociedad ecuatoriana.
SANTO DOMINGO DE LOS TSÁCHILAS • Hace 37 años falleció Abraham Calazacón, exactamente el 8 de julio de 1981. Con su muerte se cerró uno de los capítulos de la nacionalidad tsáchila, pues durante su periodo como líder fue considerado el gobernador vitalicio.
Su legado lo continuó su hijo, Nicanor Calazacón, quien ostentó también el título de gobernador, pero se encargó de democratizar los procesos para elegir al presidente de esta comunidad.
Uno de los líderes actuales, Marco Calazacón, nieto de Abraham, explicó que su abuelo fue el primer gobernador tsáchila reconocido por el Estado ecuatoriano. “Mi mamá me contaba que mi finado abuelo era un gran dirigente, que hizo mucho por el reconocimiento tsáchila en todo el país, sobre todo en la lucha por los territorios”, adujo.
Figura
En la actualidad, gobernador vitalicio es un título que se le ha otorgado única y exclusivamente a Abraham Calazacón, por ocupar durante algunos años el cargo, además, por toda la gestión desplegada por el beneficio de la nacionalidad.
“Era necesario también en ese momento que el proceso cambiara. En lo personal, considero que fue un paso importante que después de Abraham se abran procesos democráticos y de elecciones, porque las nuevas generaciones venían con nuevos aires e ideas para impulsar a los tsáchilas”, agregó Marco Calazacón.
Se creó también el Tribunal Electoral Tsáchila, ente encargado de las votaciones, desde el conformación de los padrones hasta las inscripciones de candidatos, proceso eleccionario y escrutinio. Después de Nicanor hubo otros líderes, como Gumersindo Aguavil (2010-2014) y Javier Aguavil (2014-2018), todos electos por votos y listas confeccionadas de acuerdo con la cantidad de miembros de las comunas tsáchilas.