Exportaciones no petroleras descienden un 65 por ciento.
El café y el cacao pasaron de un crecimiento anual del 11% en 2017 a 3,9 en 2018.
A la recesión interna, en la que se prevé un crecimiento del 1% o menos, ahora se suma una desaceleración en el sector externo, exceptuando el petróleo que se ha mantenido en precios altos.
Así, las exportaciones no petroleras pasaron de crecer un 11% en 2017 a solo un 3,9% en lo que va de 2018. Esto representa una caída de más del 65% en el crecimiento anual, por lo que el país pasó de generar 715 millones en ventas internacionales adicionales a solo 277,7 millones.
Patricio Alarcón, presidente del Comité Empresarial Ecuatoriano (CEE), aseveró que esta situación prende todas las alarmas en el sector exportador, porque no solo caen las ventas de los productos, sino también la participación en los mercados internacionales.
“Debemos trabajar en la competitividad, en estrategias de desarrollo productivo a corto plazo y así generar un crecimiento de un 5% al año”, dijo.
Sectores afectados
El café ha sufrido la desaceleración más profunda, tanto en sus ventas como en su producción y hasta la fecha no se ha establecido un plan estatal para detener la caída. Desde 2017, acumula una reducción de ingresos que totaliza los 67,7 millones de dólares, que se traduce en una baja en la actividad del 31%.
Lautaro Astudillo, productor cafetero, comentó que existe un gran problema de abastecimiento de la materia prima en el sector. “La situación es muy complicada, e involucra a industriales y productores. Las cosechas han caído más de lo que las autoridades han podido determinar”, contó.
Por su parte, las exportaciones bananeras se redujeron en más de 2 millones de dólares, con respecto a las ventas de 267 millones en 2017. Una de las principales causas, según Ernesto Villa, experto en comercio exterior, es la baja de hasta de un 15% en la demanda de banano desde Rusia. “La situación tiene relación con la devaluación del rublo”, puntualizó.
En el caso del cacao, la disminución llega a más de 50 millones de dólares, lo que representa un fenómeno que se mantiene desde hace dos años.
Iván Ontaneda, de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), señaló que Ecuador sigue a la cola en cuanto a competitividad. “Producir una tonelada de cacao cuesta 1.600 dólares, pero en países vecinos como Perú cuesta 1.200”.
A su vez, Alarcón recalcó que el país aún mantiene una alta carga arancelaria y una excesiva tramitología, lo que también abona a los problemas para bajar los costos de producción.