Un mezquino al volante
Cada día la televisión ecuatorian publica noticias de accidentes d tránsito. El televidente se qued paralizado observando imágen de buses destrozados, cadáveres heridos de gravedad. Algunos ch feres se dan a la fuga. A otros tam bién los llevan al cementerio.
Este es el cuadro fúnebre. Viv mos en un país con un alto porcen taje de choferes profesionales irre ponsables porque las institucion de tránsito y sus autoridades pe mitieron la insensatez a alguno desequilibrados. Las personas qu llegan a las terminales terrestr pueden observarlos: despeina dos, mal vestidos, comen de la fundas de las vendedoras ambu lantes. Contadas cooperativas so excepcionales con buses nuevos modernos, atención respetuosa amable, incluyen azafata si los vi jes son de muchas horas.
Existen leyes, control y polic de tránsito. El problema persist Recordemos que a nuestras qu ridas tierras llegaron conquista dores barbudos, metidos en ar maduras de hierro y cabalgand caballos briosos. Los Reyes de E paña enviaron muchas leyes qu defendían a los “indios”. Nunc cumplieron ni un artículo. ¿Vien desde el siglo XV y XVI la tara d incumplimiento a la ley? Ahora e este siglo XXI y en la década gan da por los corruptos, innombrabl asambleístasayudaronalpresiden ególatra de aquellos días a burlar Constitución que ellos discutieron escribieron con faltas de redacción
La burla y sumisión, a más d déficit de pensamiento de quien se regocijaron con el poder, crearo muchas artimañas para deshonr la ley. Peor que los conquistador que nunca pisaron la escuela.
A esta broma amarga se une los choferes roñosos y mal educa dos. No saben cómo tratar a la gent Desconocen la cultura del amor a vida personal y el respeto a la ajen Como escribe el maestro Simón E pinosa Cordero: “Un busero asesin es un mezquino al volante”.