¿Hasta cuándo?
Políticos que llegan al poder como cualquier miserable “avivato”, amasan fortunas a vista y paciencia de los alelados ciudadanos y se apropian sin misericordia de los bienes públicos, en aproximadamente diez años han transformado su raquítico aspecto físico en horripilantes momias. Esta degradación no se compadece con la sorprendente ruina y empobrecimiento de la mayoría de ecuatorianos. Al vernos esquilmados hasta más no poder hemos escogido el camino del silencio y caminamos alrededor de los engendros hasta que la tormenta de la corrupción termine. Pero cuán equivocados estamos al creer que con los mismos “avivatos” en el poder el calvario va a cambiar. Están tomándose tiempo para arrasar con lo que queda de país, desaparecer todo rastro y dejarnos en tinieblas o sepultados en la quiebra económica y moral.
Luis Vásquez CC: 1000677359