Rumichaca se paralizó y les tocó caminar
Más de 800 automotores permanecieron atascados, después de las 13:00, en el trayecto El Barrial – Rumichaca, por más de dos horas, generando un gran malestar en los usuarios frecuentes de esta vía que conduce a Ipiales.
Al otro lado de la frontera ayer sucedía algo similar con los automotores que pretendían retornar o ingresar a Tulcán desde el vecino país. Ocho policías ecuatorianos en Rumichaca persuadían a los conductores para que regresen a la capital carchense.
Según los uniformados, una nueva protesta provocaba la congestión, que mantuvo inmovilizados y enlistados hasta después de las 14:30 a más de 1.200 vehículos a los dos lados del viaducto.
Rubén Rojas, periodista colombiano, informó que a las 13:00, buses de las empresas Cootranar, Supertaxis y Transipiales fueron cruzados cerca al Puente Internacional de Rumichaca con el propósito de interrumpir el tránsito y llamar la atención del Gobierno de Colombia.
Los manifestantes señalan que el éxodo venezolano crea el problema, debido a que unidades de pasajeros vienen directamente desde Cúcuta, en la frontera con Venezuela, directamente hasta Ipiales con los migrantes.
En Rumichaca embarcan viajeros de esa misma nacionalidad que retornan a territorio ‘llanero’ y suben además en esa ciudad o en los exteriores de la terminal a usuarios que van a ciudades intermedias como Cali, Bogotá, entre otras, cobrándoles la mitad del pasaje real.
Esta dinámica, que está al margen de la ley, tiene seriamente molestos a los motoristas de la urbe fronteriza (Ipiales), que demandan mayores controles para frenar este tipo de transporte, que no tiene los permisos de operación en esas rutas.
Carlos Oviedo, comunicador nariñense, explicó que el perjuicio es grande, ya que levantan a los viajantes en carretera y dejan sin trabajo a las operadoras habilitadas que receptan a los usuarios en la terminal.
Andrés Cabezas, camarógrafo de Carchi Noticias, quien tuvo que trasladarse caminado hacia Ipiales, indicó que reclaman no solo controles a los ilegales sino también que se realicen operativos en los parqueaderos ubicados a pocos metros del ducto internacional (Rumichaca).
Los continuos paros en la frontera obstruyen la movilidad, afectando no solo a las actividades económicas de la región sino también al transporte de carga internacional, que ve reducidos los viajes, debido a que los exportadores e importadores comienzan a utilizar el mar para movilizar las mercancías.
(CMRV)