Liberalización de diésel se aplaza para la otra semana
Autoridades y comercializadoras de combustible se reunieron ayer para tratar temas técnicos y prácticos sobre el mecanismo de liberalización de los precios del diésel y la focalización del subsidio. No obstante, las decisiones se aplazaron para un nuevo encuentro la próxima semana.
De esta cita a puerta cerrada, en Petroecuador, también quedó pendiente una definición sobre los márgenes de utilidad, tanto en la comercialización como en la distribución de combustibles.
Carlos Pérez, ministro de Energía, comentó que el objetivo de los acercamientos con las comercializadoras es darle viabilidad a lo establecido en el Decreto 619, sobre todo con lo correspondiente a los costos y los márgenes que se deben tomar en cuenta para la determinación mensual del precio del diésel, tal como ocurre con la gasolina súper.
Mientras tanto, el galón de diésel se mantendrá a 1,37 dólares, pero si se ejecuta la liberalización, debido a las condiciones de mercado y los precios internacionales del crudo, el valor podría fluctuar entre los 2,40 a 2,50 dólares.
Distribuidores
Por su parte, los distribuidores reclamaron por no ser incluidos en las reuniones con las autoridades de Gobierno y denunciaron, que como efecto directo de las últimas decisiones sobre el precio de las gasolinas, su margen de ganancia se redujo del 13% al 9%.
Oswaldo Erazo, de la Cámara Nacional de Derivados de Petróleo, explicó que piden una reunión directa con Lenín Moreno, y la revisión de los márgenes. “Exigimos que se tomen las decisiones para retornar, al menos, al 13%”, dijo.
Por su parte, Jenny Naranjo, distribuidora, recalcó que el nivel de ganancias en la actualidad es más bajo que hace 15 años. Así también, José María Garzón, otro distribuidor, comentó que la situación es más crítica en zonas rurales, donde diariamente se deben recorrer más de 150 km para entregar productos.
Los distribuidores acordaron una nueva reunión, el próximo miércoles en Quito, para establecer estrategias en caso de que sus pedidos no sean escuchados.
Otra propuesta, tanto de distribuidores como de analistas, es que se termine el monopolio de importación de combustibles que tiene Petroecuador. Con eso se buscaría un menor precio en la terminal y, por ende, de venta al público.
Un ejemplo de las ineficiencias sería, según Alberto Acosta Burneo, que la gasolina súper en EE.UU. está costando 2,88 dólares el galón, mientras en el país el precio es mayor.
Francisco Silva, de la Cámara Nacional de Distribuidores de Derivados de Petróleo, comentó que la liberalización de la importación sí es viable con la normativa vigente, pero tomaría meses, porque las comercializadoras privadas tendrían que invertir para tener la infraestructura requerida.