Contribuciones importantes
° Lo positivo va desde el combate a la pobreza y el fortalecimiento de la autoestima, hasta la mejora del ambiente urbano, la gobernabilidad participativa, el ordenamiento territorial y la seguridad alimentaria y nutricional.
Como un medio de vida, genera emprendimientos que inicialmente se orientan a la subsistencia con opción a la escalabilidad y réplica.
Se trabaja con la comunidad para rescatar la autoproducción de alimentos y caminar hacia su sostenibilidad; es un camino al cambio, a la construcción de conocimiento, a la mejora de convivencia y del bienestar personal, en comunidad y con la naturaleza.
Esta actividad, como práctica cultural, viene acompañada del desarrollo y aplicación de conocimientos ancestrales y tecnologías alternativas válidas en la actualidad por su sustento técnico y científico, tal es el caso de las ‘chacras’ o pequeños campos de cultivo, manejados dentro de la cosmovisión andina.