El trabajo que cumplen los artesanos de la parroquia dinamiza la economía y promociona los productos locales.
IBARRA • La parroquia rural de San Antonio de Ibarra es reconocida a nivel local, nacional e internacional por la labor que desempeñan la mayoría de los habitantes de esta localidad, con la elaboración de esculturas hechas a base de madera, el tallado de figuras religiosas entre otras artesanías de gran valor cultural que le han dado a este territorio el nombre de ‘la cuna del arte’. En la actualidad, a través de las ferias que realizan los sábados y domingos en la plaza Eleodoro Ayala promocionan la producción local a los turistas que llegan a San Antonio.
Asentada en las faldas del majestuoso Taita Imbabura se encuentra la jurisdicción, en donde sus hombres y mujeres usan su imaginación y hábiles manos para tallar bellas e impresionantes figuras de diferente temática, donde sobresalen las artesanías de índole religioso.
La historia marca el paso de más de tres siglos de la localidad, considerada como la de mayor población de Ibarra, en la que conviven kichwas, afroecuatorianos y mestizos, siendo ésta la razón de la gran diversidad artística presente.
Feria de arte
Muy temprano entre sábado y domingo, los talleres abren sus puertas e inmediatamente inicia la gran labor, así se lo puede evidenciar al visitar el espacio en el que trabajan los integrantes de la Asociación San Antonio de Padua. Cada uno da forma a las artesanías que elaboran con habilidad y esmero.
En principio, cuentan que los materiales más usados, por las bondades que ofrecen, son la madera del sauce y el aliso.