Urbanicidio
En ocasiones pensamos que lo moderno es sinónimo de desarrollo, olvidando que toda ciudad es el resulado de una particular imbricación de una sociedad y una geografía que se configuran entrelazando momentos históricos que se sustentan en el presente y se proyectan hacia el futuro. Ahí radica la importancia del patrimonio que sirve esencialmente para tener sentido de continuidad colectiva, comprendiendo que antes de nosotros ya hubieron habitantes que nos precedieron y que después habrá otros que nos van a suceder. En este contexto, es pertinente identificar el patrimonio o lo que es patrimonializable, como odo aquello tangible e intangible que merece la pena ser rescatado del iempo y la acción humana, de manera concreta podemos referirnos a esos lugares, calles, edificaciones, gastronomía, anécdotas, historias que han dejado y dejan huella en la dentidad de una ciudad.
El patrimonio es un bien común que debe ser vivido, usado, disfruado, reinterpretado y apropiado por todos, por lo que debe ser una prioridad al momento de hablar sobre el desarrollo de las ciudades. No es posible que en Ibarra estén en el abandono lugares y edificaciones como el Torreón, la Catedral, el Redondel Cabezas Borja; el baño del nca y la Tola de Caranqui; la Bajada de los Molinos; y, casas que guardan a memoria de la reconstrucción de a ciudad después del terremoto de 1868. Patrimonio arquitectónico que está condenado al urbanicidio debido a la presión de grupos inmobiliarios que con la inacción cómplice de las autoridades no valoran su mportancia debido a que lo único que les interesa es reemplazarlos por edificios o conjuntos habitacionales que les genere lucro personal.
Ventajosamente todavía hay barreños preocupados por cuidar y rescatar el patrimonio de la ciudad, quienes han conformado la Fundación Cultural y de Desarrollo Social Pedro Moncayo. Este tipo de niciativas deberían tener mayor apoyo por parte del Municipio para mplementar de manera articulada con las universidades, las empresas, a ciudadanía, un plan patrimonial de Ibarra que se fundamente en la siguiente ecuación: patrimonio, turismo, desarrollo económico, empleo y mejor calidad de vida para os habitantes. Pensar en Ibarra es pensar en el desarrollo de la urbe combinando el ayer con el presente.