Sistema educativo perverso e impune
Han transcurrido más de diez años, desde que el sistema educativo en Ecuador, a nivel de primaria y secundaria omó un rumbo diferente. Según sus ideólogos permiiría mejorar la calidad de educación. La realidad es otra; errores y aciertos en este sistema, ponen en luz roja al actual ministro de educación. Los hechos de violencia están al asecho no solo en las calles, sino que entran a los planteles educativos. Esta vez parecen otros actores: padres y madres de familia, que pueden rrumpir clases, insultar y hasta agredir, por no estar de acuerdo con decisiones o actitudes poco agradables de profesores. Este sistema perverso, al profesor le obliga hacer ‘cómplice’ de todas las adversidades que suceden en el aula. Por lo tanto, ¿qué más es espera a los profesores? La LOEI es permisiva y abusiva en ciertos aspectos y es el imitante para el accionar del docente. Hecho que refleja la falencia en el no cumplimieno de su rol de padres por la falta de valores, muy venido a menos en estos tiempos. La violencia estudiantil quebrana la autoridad en el aula, y al docente le deja sin blindaje y sin poder defenderse ante cualquier acto de intimidación. Roberto Camana Fiallos C.I. 1803384526