Pasear perros se convirtió en su negocio
El proyecto del cuidado y atención exclusivamente a los perros se concretó hace cinco años en Ibarra.
IBARRA• Cerca de 36 canes, divididos por grupos y dirigidos por una persona, recorren algunos barrios de la ciudad, como una forma de lograr que los animales puedan convivir sin estrés, compartan con sus similares y tengan una vida tranquila, sin ser agresivos.
El trabajo, que nació como un emprendimiento, se fortaleció a través de un grupo de seis jóvenes, quienes se dedican a brindar los servicios de pasear a los animales.
“El plan, que era universitario, ahora es un oficio”, señaló Cristian Cortés, integrante del grupo. ‘Matolusa Dog Walker’ es la firma que cumple el servicio para los canes. El nombre fue puesto en representación de las identificaciones de cada mascota que atienden.
Paseos
Los jóvenes son quienes recogen de cada casa a los perros, para luego, por el lapso de tres horas y media, retornarlos a sus hogares, una vez que los animales compartieron, caminaron y aplicaron esfuerzo físico.
Los dueños confían en ellos. En algunos casos entregan a la mascota para que puedan distraerlos y que no estén encerrados y no sufran de estrés animal.
La admisión de los animales es bajo ciertas normativas, como poseer el carné al día de vacunas y entregárselo con un collar.
De lunes a sábado es el horario que cumplen los monitores. Especificaron que en la mañana es el tiempo ideal para que los perros puedan salir, por ser un clima fresco y beneficioso, sin sofocaciones.
Por lo general, cada paseador lleva entre cinco y seis canes. El jugueteo entre ese lapso de tiempo se vuelve importante para el animal para quemar calorías, lo que evita que sufra obesidad y así ejercitan sus articulaciones acompañado de un refuerzo de actividad mental.
Para el proceso, los acompañantes de los canes primero llegan a conocer a la mascota, sus características… Mencionaron que la raza Pitbull sería la más compleja. A ellos se les aísla y caminan individualmente para evitar que tengan confrontaciones con los otros. No obstante todos los demás mantienen apegos y recorren juntos sin contratiempos.
Efraín Cuascota, paseador, dijo que se ha demostrado que los perros que salen de paseo con sus dueños u otras personas se vuelven más sociables tanto con los seres humanos como con otros perros.
Agregó que es muy agradable contemplar a la mascota jugar en el parque con otros de su misma especie. De esa manera el fiel amigo no será agresivo ni padecerá depresión.
Nosotros tenemos curso de adiestramiento y el aval para cumplir esta tarea”. CRISTIAN CORTÉS PASEADOR
Esta idea nace cuando presenté un emprendimiento en la universidad”. EFRAÍN CUASCOTA PASEADOR