Artistas recuperan la música cotacacheña
‘Musiqueando’ se denomina el grupo que retoma lo valioso de las partituras de Cotacachi, así como otros ritmos.
música propia y cotacacheña, y decir al público que tiene un lugar porque es valiosa.
Se presentan en escenarios privados, conciertos públicos, y creen que es necesario grabar y registrar el trabajo de ‘musiquear’.
En la provincia de Imbabura, no existe a la música de élite como el jazz, blues, bossa nova, boleros que renuevan el amor, pasillos del recuerdo, valses que tientan a las parejas al bailar. El público merece lo mejor. POR: RAMIRO RUIZ R. • Cada uno de los maestros del grupo ‘Musiqueando’ se formó desde niño. Es un grupo de Cotacachi y, a la vez, ellos forman parte de otras orquestas, pero no pueden renunciar a un lazo que viene desde siempre. Se habían separado durante un tiempo y cada uno tomó su camino. Siguen ‘musiqueando’. Es decir, haciendo música. Más todavía, música de autores y compositores cotacacheños, ecuatorianos y del mundo.
Desde el 2011 decidieron hacer música de otro estilo. Con una formación académica y miles Han dado un nuevo comienzo y de presentaciones en escenarios cuidan la ejecución, los arreglos, abiertos y exclusivos, juntan creaciones y una visión empresarial. conocimientos y vivencias. El Hacen uso de las tecnologías amor a la música es “un amor como página web, videos, redes que florece y nunca termina”. sociales, YouTube. El grupo
6 Así dice la canción. es dúctil en el manejo
La originalidad está en de géneros y versátil en la mantener intacta la música instrumentalización justa nacional, con interpretaciones y composición rigurosa. de excelente calidad. Trabajan en alcanzar destrezas perfectas y gusto fresco. En septiembre del 2014 grabaron un disco, “Algo entre manos”, hermoso título para las canciones ecuatorianas, y más, una frase con muchos significados.
Tratan de compartir y orientar a la sociedad en el gusto y la sensibilidad. El arte sirve para gozar, pensar y aprender. El proyecto, dice Rubén, es retomar la
El nuevo proyecto La interpretación
Cada uno es lector a primera vista. Compositores, arreglistas, tienen una historia musical de años de preparación académica, y experiencia en los escenarios del país, hasta en Nueva York, París y Singapur o Japón.
Cogen los instrumentos. Gandhi, el saxo; Marcelo Saltos se sienta frente al piano, Bayron Gómez el bajo, Mellington Saltos los instrumentos de percusión, Edison Meneses y Rubén Terán las guitarras. Comienzan tocando una pieza de jazz, luego será un tango, y dos valses ecuatorianos.
Lo que viven
Marcelo dice: “Me emociona trabajar con amigos, más que hermanos. Es una bendición estar juntos. Dios nos volvió al cauce”.
“Todos somos alumnos de Edison Meneses, mi mentor. Volvemos con la madurez. Tocar con Edison y los amigos me honra, ellos han sido y son las mejores personas”, exprea Gandhi.
Edison: “Amigos, generosos con sus palabras. Me dan la gentileza de estar con ellos. Vuelvo a trabajar con estas guaguas. No ensayamos, gozamos haciendo música, musiqueando. Dios les pague y les agradezco con mucho cariño”.
“Garantiza el éxito de este proyecto trabajar con almas gemelas en la música. Muchos grupos han tenido problemas y se han mantenido. Aquí sentimos armonía”, agrega Gandhi.
Wellington menciona: “He puesto de ejemplo a los músicos de la familia. Nací y crecí en el grupo. Compartí con Byron y Marcelo, mi hermano. Me incluí y estaré con ellos sin que ninguno me invite. A mis maestros, con quienes toco, los conocerán en el país”.
“Siento emoción compartiendo con la familia de músicos. Esto hace que mi generación valga la pena. El grupo tiene coherencia entre el arte y la realidad”, finaliza Byron.