La actividad comercial fluye mejor en la lengua ancestral
Desde tempranas horas de la madrugada se puede observar el ajetreo de los indígenas de las comunidades aledañas al sector de Pucará en la parroquia Pilahuín en Tungurahua, donde se desarrolla una feria intercomunal como iniciativa de los propios comuneros.
En el mercado comunitario ubicado a más de 40 minutos de Ambato, vía a Guaranda, el intenso frío y la neblina de la mañana no es impedimento para que hombres y mujeres arriben al centro de acopio con los diversos productos que se dan en esta zona Andina.
Cebolla, papas, mellocos, entre otros productos agrícolas, así como víveres y legumbres, se expenden desde la mano misma de los productores, pero lo que realmente hace grande a estos espacios de comercialización son las expresiones ‘publicitarias’ que utilizan para llamar a sus clientes, puesto que lo realizan en su propia lengua. Francisca Agualongo, productora de ajo, manifiesta: “Hablando en nuestro idioma nos sentimos más a gusto y en confianza, además nos sale de forma natural”.
El kichwa gana mucho espacio en la actividad comercial que se desarrolla en las ferias intercomunales, debido a que más del 80% de los que asisten a estos eventos son indígenas.