Compromiso

Les escribo estas líneas desde Montevideo—Uruguay. Estoy cursando la instancia presencial del Diplomado de Políticas Públicas para el Desarrollo organizado por la Fundación Konrad Adenauer y la Asociación de Estudios Populares. Este encuentro se realiza con 15 jóvenes líderes de toda Latinoamérica, quienes han obtenido las mejores calificaciones del cursado. El propósito es detectar los 12 retos de las políticas públicas en el siglo XXI.

El primer reto es preguntarse si hay que ¿accionar lo planificado o planificar lo accionado? La respuesta entender que el peor diseño es el que no se gestiona después y la peor gestión es la que no se diseña antes, aunque en ciertos casos puede hacerse al revés. Después viene el reto de gobernar y administrar con responsabilidad. Sin Estado no hay políticas públicas, y no hay Estado a solas. El populismo debe entender eso a estas alturas. Otro reto es participar antes para no lamentarse después. Los gobiernos sin el pueblo deben ser abolidos con participación. La visión humanista tiene como reto buscar el bien común, privilegian a los más débiles, lo que nos lleva al siguiente reto: atender las prioridades de la gente y no de los dirigentes.

Después de estos retos base, vienen los que tienen más incidencia en la formulación de las políticas públicas. Debemos buscar mejorar lo que hay y no empezar siempre de cero. Esto se logra diagnosticando participativamente sin cegueras, para tomar decisiones políticamente, sin improvisaciones. Al momento de actuar el reto es dirigir productivamente, sin inercias. Al momento de rendir cuentas se debe difundir transparentemente, sin demagogias. Si todo sale bien, debemos continuar lo bueno, a pesar del autor. Y como conclusión, entendemos que la clave es votar buenos candidatos, para botar malos gobernantes.

Esta enriquecedora experiencia me ha dado la guía para analizar, diseñar, gestionar y evaluar políticas públicas que mejoren nuestra ciudad, provincia y país. Ese ha sido mi compromiso.