Hermanas muertas en volcamiento fueron sepultadas en Quinindé
Fallecieron cuando el carro en que viajaban cayó a un abismo. Iban de Quito a Quinindé donde viven sus padres.
La tarde del domingo último, en el camposanto ‘Quinindé’, fueron sepultadas las hermanas Jaily y Eloísa Muñoz Cedeño, quienes fallecieron la noche del viernes pasado en un accidente de tránsito en el kilómetro 40 de la vía Calacalí-la Independencia, cuando viajaban desde Quito a Quinindé.
Los cuerpos de las víctimas fueron llevados al Centro Forense de Quito de donde sus familiares los retiraron y trasladaron a Quinindé; fueron velados en el recinto Santa Elvira donde viven sus padres.
Se conoció que la finalidad del viaje era para entregar en Quinindé invitaciones a sus parientes, para que asistieran a la celebración del cumpleaños de una bebé, hija de una de las ahora fallecida. Pedro Muñoz, conocido funcionario de Agrocalidad en Quinindé, es el papá de Jaily y Eloísa.
El periodista quinindeño, Jéfferson Orellana, manifestó conocer desde muy pequeñas a las hermanas que murieron en el fatal accidente, pues, eran sus vecinas en el sector ‘Santa Elvira’ de Quinindé.
“Las chicas eran miembros de una familia respetable del lugar, pero por estudios y trabajo se fueron a vivir a Quito”, refirió el comunicador social.
El fallecimiento de las hermanas Jaily y Eloísa Muñoz Cedeño, ocurrió la noche del viernes en el kilómetro 40 de la vía Calacalíla Independencia, al caer a un abismo el vehículo en el cual viajaban cinco mujeres, incluida una niña de 11 meses de nacida.
El carro era conducido por una tía de ellas; también viajaba, Gema Muñoz Cedeño, hermana mayor de las chicas y la bebé de 11 meses de nacida, hija de Eloísa.
Presuntamente por la densa neblina que había en el sector, la conductora realizó una mala maniobra en el volante y el automotor cayó en un abismo de aproximadamente 150 metros de profundidad, muriendo de contado las dos jóvenes, quedando gravemente heridas la tía y su sobrina, mientras que la bebé, resultó ilesa.
Un chofer que pasó por el sector fue quien dio aviso al ECU911, pero cuando llegaron los grupos de socorro ya varios voluntarios estaban auxiliando a las heridas y habían rescatado a la niña, a quien la tenían en la carretera.
“El acceso al lugar donde cayó al carro era inaccesible, pero la gente de buena voluntad llegó por un camino de trochas que estaba en un costado y ayudó a sacar a las mujeres heridas, que en estado de gravedad fueron trasladadas en ambulancia a hospitales de Quito”, relató el conductor Manuel T.