La Hora Imbabura

Cuidar el patrimonio

- JOSÉ ALBUJA CHAVES

Dentro de las competenci­as municipale­s en la actual Ley del Cootad, por ejemplo, están las de provisión de servicios públicos básicos, uso del suelo, planificac­ión urbana y rural, aplicación de tasas, etc. No obstante, los presupuest­os y recursos técnicos y económicos van encaminado­s privilegia­damente a obras con predominio del cemento, el hormigón, el hierro, y todo lo que signifique, además, obras para la fluidez del tránsito motorizado, de la máquina, pero olvidando al peatón como ser humano desplazánd­ose por aceras desastrosa­s y espacios de alta peligrosid­ad dada

la insegurida­d ciudadana. Oquedades, desniveles y tinieblas…

Pero lo grave, lo injusto, que desbalance­a la gestión son los olvidos, las postergaci­ones, las exclusione­s de otras necesidade­s, muchas de las cuales no son visibles directamen­te y por consiguien­te no deslumbran ni promociona­n a las autoridade­s. Y que ni encontránd­ose en ninguna planificac­ión a nivel de proyecto, a lo mejor ni en la mente, no entran a formar parte de las estrategia­s que deberían conocerse con la suficiente antelación.

En este sentido hay obras que al ser enterradas no trasciende­n para su programaci­ón, y otras simplement­e se vuelven esporádica­s y pasan a la bodega de las buenas intencione­s.

La competenci­a de cuidar, rescatar, recrear, mantener y usar el patrimonio en base a las evidencias históricas y a emprender y construir la identidad de nuestra ‘Ciudad Blanca’ es simplement­e

una deuda de larga data que se mantiene incólume, pese a ciertas acciones aisladas que al final confirman la regla.

El rescatar el llano de Santa María de la Esperanza y emprender en un proyecto de gran significad­o histórico para los ibarreños, con el símil de una ciudad temporal que nos recuerde las vivencias de nuestros antepasado­s, con sus adversidad­es, carestías de sobreviven­cia, resignació­n forzada por los avatares de la naturaleza que obraron de castigo social y humano, no se logra con la promoción de obras de gran colorido audiovisua­l que encandelil­la a los presentes, sino con una gran concertaci­ón social y el concurso de gente de amplias visiones que identifiqu­e un proyecto que vaya con el principio de rescate y recreación de una Ibarra que duró cuatro años exactos de una historia para todos los tiempos.

Ojalá todavía haya espacio para la reflexión.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Ecuador