LA EERSSA AL MARGEN DE TRÁMITES VIRTUALES
Malestar en el gremio eléctrico y la ciudadanía porque la EERSSA no va con los trámites virtuales.
Una vez que el COE Cantonal decidió pasar a semáforo amarillo, la mayoría de instituciones públicas tienen establecidos procedimientos para reanudar las actividades, algunas en forma presencial y otras en forma virtual. Más ocurre que la Empresa Eléctrica Regional del Sur S.A (EERSSA) en su página web tiene una oficina virtual en la cual existe un link Contratistas/Ings eléctricos pero que desgraciadamente no está todavía habilitada.
Aparentemente esta institución todavía no tiene lista una plataforma para realizar trámites que tanto contratistas como ingenieros eléctricos en libre ejercicio profesional deben realizar como aprobación de proyectos, construcción de obras, recepción de obras, etc. y en fin un sinnúmero de actividades que se deben tramitar en la EERSSA que en tiempos normales son una verdadera odisea realizarlos por lo largo y tediosos que son los procedimientos burocráticos que dilata la ejecución de los proyectos en el sector eléctrico del área de concesión de la empresa; ahora por último ni siquiera han tenido habilitada una plataforma para poder realizar los trámites, lo que dificultará más aún la gestión para quienes necesitan el servicio básico de energía eléctrica.
Se puede entender que esta ineficiencia es producto de que al frente de la institución no se encuentra un administrador que conozca el sector eléctrico, pues la EERSSA ha sido entregada como botín político a gente sin conocimiento elemental del área eléctrica.
Existe malestar dentro de la misma institución por el continuo cambio de funcionarios de un puesto a otro con la finalidad de que cumplan con sus intenciones de manejar, en especial los procesos de contratación a su antojo, producto de lo cual algunos procesos han sido objeto de reclamos a las instituciones de control y otros declarados desiertos por irregularidades en la elaboración de los pliegos con claras intenciones de beneficiar a ciertos oferentes, colocando requisitos rebuscados o inventados y que no están apegados a la ley de contestación pública.