Crisis del IESS y en espera
El momento político hace que se retrasen los cambios para evitar el colapso del fondo de salud del Seguro Social. Se analizan vías para aumentar las aportaciones.
Cada año, los gastos para atenciones de salud se incrementan un 15%
Jorge Wated, presidente del Consejo Directivo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), explicó que sin hacer nada, los servicios de salud pueden garantizarse hasta el inicio de 2022. “Por el número de prestaciones que se han ido sumando desde hace muchos años atrás, el modelo está llegando a su límite”, dijo.
El principal problema es que muchas de esas prestaciones no tienen financiamiento. Así, por ejemplo, la institución está cubriendo el 100% de los servicios por enfermedades catastróficas, pero los recursos deberían venir de una fuente tripartita (trabajadores, empleadores e IESS). Para eso, Wated aseguró que se está trabajando en un reglamento.
Si se suman otras atenciones sin financiamiento, como la de los hijos menores de edad de los afiliados, el costo anual llega a los $500 millones que, según el presidente del Consejo Directivo, se tienen que sacar de las reservas del fondo, lo que provoca una pérdida creciente del patrimonio.
Alternativa
“Hay todo tipo de medidas que puedes tomar, hay miles de alternativas. Lo que pasa es que todas tienen impacto político. Estás en mitad de unas elecciones y todos van a querer ser los grandes ganadores de una elección a costa del IESS. Eso no puede pasar”, acotó. Según Wated, el nuevo modelo que se debe implantar, con el fin de evitar un colapso completo, incluye, por un lado, reformas de ley, y, por el otro, decisiones que se pueden dar a nivel de Consejo. Sin embargo, el proceso electoral en marcha complica cualquier decisión, aunque se espera concretar algunas acciones hasta el final de la actual administración y el resto dejarlo para que lo implemente el próximo gobierno.
Se analizan vías para aumentar, lo menos posible, las aportaciones.