Se juraron amor eterno en la cárcel de Quevedo
Verónica V. y un privado de la libertad contrajeron matrimonio en el patio de un pabellón de varones.
Por primera vez en la provincia de Los
Ríos se realizó un matrimonio civil dentro de un Centro de Rehabilitación Social. Esta vez, Verónica V., de 22 años, llegó a la cárcel de Quevedo con un vestido blanco y bien ataviada, para jurarse amor eterno junto a su prometido.
Su ahora esposo, una persona privada de la libertad (PPL), de 27 años, facilitó todos los documentos y papeles para que su ahora esposa realizara los trámites pertinentes con ayuda del Registro Civil y los directivos del centro de reclusión.
La ceremonia se realizó en el patio general de varones del pabellón conocido como ‘Samaritano’, y contó con la presencia del director del Centro de Rehabilitación, Carlos Vivas; el director provincial del Registro Civil, Gualberto Vargas y la coordinadora cantonal del Registro Civil, Victoria Juez.
También asistieron los testigos y unos familiares que tenían admitido el acceso.
Reacciones
Vivas admitió que se sentía complacido de que se respeten los derechos civiles de quienes están condenados. Espera que esto sirva como motivación para otros cantones o provincias.
“Cabe indicar que este tipo de derechos no se pierden al estar sentenciados ya que solo se pierden sus derechos políticos; además, la SNAI (Servicio Nacional de Atención Integral de Personas Adultas Privadas de Libertad y Adolescentes Infractores) es muy respetuosa de los derechos de los PPL y brinda todas las facilidades a los familiares e internos para que puedan realizar estos trámites”, enfatizó.
Vivas resaltó que los trámites fueron con mucha celeridad y quienes fijan la fecha es la pareja.
Por su parte, Vargas explicó que el proceso para la celebración de un matrimonio dentro de un Centro de Rehabilitación Social, se realiza una vez que los contrayentes solicitan al director de la cárcel y él a su vez oficia al Registro Civil. “Luego de que se hayan cumplido los requisitos como: la revisión en el sistema tanto de los contrayentes como de los dos testigos, se procede a solemnizar el matrimonio”, manifestó.
Dentro de los requisitos también se solicitó una curaduría, ya que la joven tenía hijos. Con esto se busca ejercer el servicio de matrimonio y el derecho de la custodia.