Sacudón económico
El Gobierno elevará el precio de las gasolinas extra y ecopaís y suprimirá puestos públicos para enfrentar crisis.
Nuevas medidas de ajuste presupuestario como la reducción del subsidio a las gasolinas extra y ecopaís, la eliminación de 25.000 vacantes públicas y disminución del salario de altos funcionarios, fueron dadas a conocer ayer.
Los anuncios se conocieron en una comparecencia conjunta en Carondelet, en la que participaron los ministros de Finanzas, Richard Martínez; de Trabajo, Raúl Le- desma; y el secretario particular de la Presidencia, Juan Sebastián Roldán.
La gasolina extra y ecopaís pasarán de costar 1,48 dólares a 1,85 dólares, lo que supone 37 centavos por galón. Los incrementos regirán una vez que se hagan oficiales los decretos presidenciales.
Este es el tercer ajuste económico de Moreno en 2018.
El ministro de Finanzas, Richard Martínez, nunció que “el Gobierno ha decidido reducir el subsidio de las gasolinas extra y ecopaís, que pasarán de 1,48 dólares a 1,85; es decir, 37 centavos adicionales por galón”.
Esta decisión constituye la primera revisión de este subsidio luego de 16 años de mantenerse sin cambio. Según Martínez, representará un ahorro anual de 400 millones, aunque el aumento en el precio no entrará en vigencia sino hasta que, en esta semana, el Ejecutivo emita los decretos respectivos.
Para dimensionar el impacto de la medida, el Ministro dijo que, por ejemplo, un vehículo tipo spark, que antes significaba un gasto de 13,69 dólares, ahora alcanzará los 17,43; o sea, 3,74 dólares más por ‘tanqueada’.
Los taxis y los buses de transporte público no se verán afectados por la disminución del subsidio. Así también, Martínez recalcó que no se tocarán los precios del gas de uso doméstico y el diésel. “Estamos trabajando en mecanismo de compensación para que el transporte público y la mayoría de la ciudadanía no se vean afectados”, contó.
Justificaciones
Por su parte, Juan Sebastián Roldán, secretario de la Presidencia, aseveró que las decisiones tomadas son importantes y no están guiadas por cálculos políticos. “No es posible que de 2005 a 2017 el país haya gastado 50.000 millones de dólares en subsidios a los combustibles. Eso representa haber dejado de hacer 12.500 escuelas, 2.500 hospitales o 2,5 millones de viviendas “, argumentó.
Además puntualizó que todo el ahorro por la reducción del subsidio de las gasolinas extra y ecopaís irá a una subcuenta del tesoro nacional, la cual solo se podrá utilizar para objetivos específicos, como proteger la dolarización, garantizar los servicios de salud del IESS, certificar el pago de jubilaciones, y aumentar líneas de crédito.
En el caso del diésel de uso industrial, la decisión de las autoridades es liberalizar el proceso de comercialización, con lo que actores privados podrán importar el combustible y el precio se regirá por las condiciones del mercado.
¿Medida no tan efectiva?
Jaime Carrera, miembro del Observatorio de la Política Fiscal, afirmó que la revisión del subsidio es un paso en la línea correcta, pero es insuficiente y no soluciona el grave problema fiscal. “El aumento de las gasolinas simplemente compensará los ingresos perdidos por la caída del precio internacional del crudo. El déficit se mantendrá en alrededor de 6.000 millones de dólares”, acotó.
En este sentido, consideró que al no haber una reducción sustancial del gasto, el Gobierno deberá tomar medidas duras el próximo año. “Se tendrá que ajustar más los combustibles, incluyendo el diésel; aumentar 2% el IVA, y reducir en mayor medida el tamaño del Estado”, añadió.
Sin embargo, eso no sería suficiente para llegar a un acuerdo con el FMI, porque faltarían re- formas en el mercado laboral, el Banco Central y el IESS.
A su vez, desde los movimientos sociales como la Confederación Ecuatoriana de Organizaciones Clasistas Unitarias de Trabajadores (Cedocut), se consideró a la medida como un ‘paquetazo’ al pueblo y un detonante de menos actividad económica y empleo.
Más sacrificio en sector público
Raúl Ledesma, titular de Trabajo, comentó que el Gobierno central, como contraparte, profundiza la austeridad con varias medidas. La principal es la reducción, en un 10% adicional, de los sueldos de todos los ministros. Asimismo, se reducirá un 5% más en todo el jerárquico superior, a partir de la escala 3. Finalmente, también se anunció la eliminación de un total de 25.000 vacantes y un ahorro de 300 millones de dólares por la terminación de contratos ocasionales.
“Hacemos un llamado a las otras funciones del Estado para que también apliquen la austeridad. Todos, ciudadanos y autoridades, debemos arrimar el hombro para salir de la crisis y del legado de más de una década de manejo irresponsable de las finanzas públicas”, concluyó. (JS)