Cavar tumbas, ‘el trabajo más demandado en Brasil’
Sepultureros del cementerio de Vila Formosa, el mayor de Latinoamérica, en Sao Paulo, realizan exhumaciones contra el reloj para abrir nuevos espacios y poder realizar más entierros, que se han incremento desde la irrupción del nuevo coronavirus. Su jornada de trabajo se ha convertido en una lucha casi sin descanso, para atender la alta demanda en este camposanto, ubicado en la zona este de la capital paulista y donde se estima que reposan los restos de 1,5 millones de personas. La pandemia es la culpable.