Vuelve el analfabetismo
Aumentará la deserción. Los problemas se acentúan en las zonas rurales.
En la casa de Pilar Tisalema, si bien no hay mucho dinero para la comida, luego de los más de dos meses de confinamiento decidieron instalar Internet para que sus hijos no se pierdan de las clases virtuales.
Junto a sus tres hijos también estudian dos sobrinos y dos hijos de vecinos que no cuentan con acceso a Internet, ella asegura que no tiene inconveniente, pues hay que ayudarse entre todos.
Lo que no puede Pilar es encaminar de buena forma el trabajo que desarrollan todos los estudiantes que llegan a su casa, pues cada uno está en un grado distinto, y aunque se ayudan entre ellos no es suficiente.
Así, uno de los pequeños que cursa quinto año de educación básica asegura que no sabe cómo hacer las tareas, aunque uno de los muchachos que está en un grado superior le ayuda, el aprendizaje no es el mismo y hay veces que le “dan haciendo” las tareas.
Este es otro inconveniente que se suma a la falta de Internet, de dispositivos para ver los deberes e, incluso, la impotencia que sienten los profesores cuando sus estudiantes reunidos en ‘Team’ no prestan atención.
“Los que quieran aprender, que se conecten, los que no simplemente no lo hagan, este año no van a perder el año”, son las palabras de uno de los profesores, al ver que en su clase los muchachos de noveno año no atienden, entran y salen de la clase e incluso cierran el micrófono.
Estos inconvenientes son parte de los nuevos desafíos de la educación, así lo reconocen los expertos, quienes aseguran que el sistema no estaba preparado para este cambio y que se podría hablar de que la brecha en la tasa de alfabetismo será más pronunciada.
Vuelve en analfabetismo
En la página web del Ministerio de Educación, en el Índice de Indicadores hasta 2016, las personas analfabetas de 15 años en adelante sumaban 660 mil 797, siendo este el último registro, aunque ya en 2009 se había declarado al Ecuador como un país libre de analfabetismo.
Para Mateo Benalcázar, psicólogo educativo, “es aquí donde se verá mermado el aprendizaje e incluso existirá deserción”, comentó, debido a que se rompió un esquema fuertemente establecido de educación donde los padres estaban acostumbrados a desvincularse un poco de sus hijos y delegar la responsabilidad a los docentes, y los maestros, en cambio, estaban acostumbrados a tener a sus educandos en un solo sitio para la transferencia de conocimientos.
Según el decano de la Facultad de Ciencias Humanas y de la Educación, Víctor Hernández, es muy difícil brindar una educación de calidad, debido a que no se cuenta con herramientas tecnológicas ni recursos económicos adecuados.
Según Hernández si bien en las zonas urbanas se va a potenciar la educación desde casa, en los sectores marginales y el sector rural va a ser muy difícil, por lo que de seguro habrá deserción.
“Nuevamente se evidenciará una brecha entre la parte urbana y la parte rural en lo que se refiere a educación”, comentó.
Propuestas
Según Hernández se requiere proveer herramientas en el sector rural donde muchos aún no cuentan con la tecnología, y también, plantear una nueva forma de educación.
“El Estado debería impulsar programas para que las familias que no tienen las herramientas puedan acceder a ellas, abrir bibliotecas virtuales, centros de capacitación para padres, las empresas de telecomunicación deben ofrecer planes más accesibles a estas familias”, dijo.
Criterio similar tiene Fernanda Navarrete, socióloga educativa de la Universidad Central, quien además comentó que es imprescindible repensar la educación para hacerla más práctica, pues ya no volverá a ser la misma.
“Si antes se tenía una brecha enorme entre la educación privada y la educación fiscal, entre la educación del campo y la educación de la ciudad, ahora se verá más”, dijo.
Según la experta, se debe retornar a la educación diversa, adaptada a la realidad de cada localidad. “Porque se dice que no se perderá el año, pero no es así de simple, pues en realidad volveremos al analfabetismo, simplemente los chicos se desconectarán; se tendrán niños que se sentirán fuera de lugar”, advierte Navarrete.
Acceso a educación, ‘garantizado’
En una entrevista con La Hora, Monserrat Creamer, ministra de Educación, reconoció que este cambio en la educación constituye un reto para la sociedad entera, pero indicó que se garantiza el acceso a la educación, ya que no solamente se ha implementado la educación virtual, sino que se está trabajando con otras herramientas, como tele educación a través de radio y televisión, y la entrega de guías metodológicas que son distribuidas a quienes no tienen acceso a Internet.