Nueva Independencia
El 10 de agosto celebramos el Primer Grito de la Independencia, conjunto de eventos que se declararon en Ecuador, y que sirvieron como un hito en la historia de la libertad de América. De allí surgió el sentimiento de confianza para derrotar al imperio español, y que era posible alcanzar la soberanía de nuestros pueblos. Gratitud a esos héroes que nos llevaron a que seamos libres del conquistador, para transformarnos más adelante en una República independiente.
Luego de 209 años es necesario que aparezcan nuevos héroes para liberarnos, ya no del conquistador, sino de una serie de antivalores que se han apoderado de nuestra sociedad, en especial de la administración de la cosa pública. Estos enemigos son la corrupción, la insensibilidad, la incompetencia, la soberbia, el subjetivismo, y el cinismo. Estos adversarios del desarrollo y del mejoramiento de la calidad de vida de nuestros pueblos, se presentan cotidianamente en las esquinas, en los espacios de las redes sociales, en los medios de comunicación, intentando demostrar que son aliados del pueblo, ya que siempre andan disfrazados de buenas gentes y con sonrisa de puerco hornado.
Entonces la ciudadanía que quiere un verdadero cambio, debe de asumir la responsabilidad ineludible de independizarse de esos dañinos y nocivos personajes que están o sueñan con el poder para esclavizarnos y dominar el timón de los pueblos, siendo un deber cívico identificar quiénes y cuántos son, para poder bloquear su paso y su avance, y ser parte de una transformación verdadera hacia el desarrollo y el buen vivir.
Es hora de independizarnos de todo lo que ha obstaculizado ser una importante ciudad. Si somos valientes, es probable que el 24 de marzo de 2019, empiece una nueva historia.