Ecuador recibe a la cadete que murió en atentado terrorista
El comandante Villegas indicó que dos cadetes que se encuentran heridos permanecen en Bogotá.
Decenas de familiares de la cadete Érika Sofía Chicó, vestidos de negro y con gafas oscuras, recibieron ayer en el aeropuerto Mariscal Sucre los restos de la joven que falleció el pasado jueves en un atentado perpetrado el pasado jueves en Bogotá.
En un primer vuelo, a las 17:00, llegaron los padres de quien era estudiante de la Escuela Superior de Policía, Roberto Chicó y Yolanda Vallejo, en compañía de una delegación policial de Colombia.
Casi una hora después aterrizó otra aeronave, un DC3, con el ataúd de la cadete ecuatoriana que fue víctima de un atentado terrorista atribuido al ELN, mientras se encontraba estudiando con otros compatriotas en la Escuela de Policía Santander.
Honores
Seis cadetes de la Escuela Superior de Policía transportaron lentamente el féretro, que llegó cubierto con una bandera tricolor, hasta la carroza que se encontraba a 100 metros de la aeronave.
Unos 60 cadetes formaron la calle de honor para el paso de los restos de su excompañera, en medio de acordes fúnebres, entonados por una banda institucional.
Dos oficiales portaron las insignias y emblemas de Érika Chicó, así como un sombrero aceituna que lo usó con mucho gallardía mientras fue cadete de la Policía Nacional.
Secuelas
En breves declaraciones, en la sala protocolaria del aeropuerto, el comandante general de la Policía Nelson Villegas, informó que todos los cadetes ecuatorianos ya retornaron al país, excepto dos que reciben atención médica en Bogotá. Además de Carolina Sanango hay otra chica herida, aseveró.
En cuanto al sepelio, dijo que este se realizaría hoy en la capital.
La familia de Chicó ha pedido respeto a la intimidad y advertido de que no se pronunciará sobre el suceso.
Érika Sofía Chicó fue víctima
del atentado con coche bomba en la Escuela de Oficiales General Francisco de Paula Santander, en Bogotá, que dejó un saldo de 21 personas muertas y 68 heridas.