Sistemática afectación a hoteleros Por la falta de huéspedes y para darle mantenimiento a la infraestructura, están siendo apoyados por familiares.
De 700 hoteles, hosterías y hostales de la provincia de Esmeraldas, 80 están en la ciudad de Esmeraldas, el resto se dividen entre seis cantones. En abril del 2016 un terremoto les ahuyentó a los huéspedes; en enero del 2018, un atentado terrorista en un cuartel policial en la frontera norte prolongó la problemática.
En octubre del 2019 las protestas del País volvieron a frenar el deseo de viajar a sectores turísticos, ahora, con la emergencia sanitaria por el Covid, declarada oficialmente en marzo del 2020, los hoteles están con las puertas cerradas.
“La actividad turística que ha venido de tumbo en tumbo”, lamenta presidente de la cámara de Turismo de la provincia de Esmeraldas, Víctor Orellana Ocaña. Lo preocupante –agregaes que los empresarios-hoteleros serán últimos en reactivarse al final de todas las actividades económicas. sueldos y aporte al IESS.
Veinte asociaciones conformadas por las cámaras de Turismo, Comercio, Industria, Minería, Agricultura, Pesquería, Pequeña y Mediana Empresa, además de asociaciones de comerciantes, gremios de la transportación, entre otras, se organizaron para crear el ‘Frente Productivo de Esmeraldas’ que les permita reactivarse.
Entre las limitaciones para lograr los objetivos, está que durante la emergencia los siete cantones de Esmeraldas sus potenciales clientes están confinados por el semáforo sanitario rojo, es decir solo pueden abrir locales que prestan servicios prioritarios para la vida como salud y alimentos.
Mañana el cantón San Lorenzo pasará al amarillo, lo mismo hará desde el jueves Atacames, donde se concentra la mayor plaza hotelera de la Provincia ‘Verde’. Sin el permiso para funcionar que otorgan los Comités de Operaciones de Emergencias (COE), se han suspendido a trabajadores han tenido que apoyarse en familiares para que cumplan estas
Entre los argumentos del Comité para no priorizar los cambio se semáforo, es el desorden social y el progresivo aumento de muertos e infectados por coronavirus. Del 1 al 4 de junio, por ejemplo, en la ciudad de Esmeraldas murieron 17 personas.
El tiempo del distanciamiento social ha sido utilizado por los hoteleros para la reparación y mantenimiento de los hoteles, además de adecuar las medidas sanitarias establecidas en los protocolos de bioseguridad para que, en el momento de reactivar la actividad estén acorde a las exigencias y dar hospedaje seguro.