Despido de los Guardaparques
La serie de despidos en el Ecuador ha llegado hasta los funcionarios que laboran como Guardaparques del Ecuador, es decir han cesado las funciones de quienes velan por el Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP), espacios que durante mucho tiempo y en buena hora han sido resguardados de la tala ilegal, incendios, casería furtiva, apertura de caminos, asentamientos, cambio de uso de suelo y otros.
Los Guardaparques, generalmente son personal que pertenece a las mismas comunidades de donde laboran, trabajan en largas jornadas y en muchas ocasiones también están desconectados de la familia, a más de eso están expuestos a deslaves, crecidas de ríos, mareas. Son ellos quienes hacen los monitoreos de las especies, limpieza de senderos, mantenimiento de infraestructuras. Es así que, toda su experiencia es clave para la protección de las áreas en mención y en efecto para mantener el sector turístico de las mismas.
En un escenario mundial de vulnerabilidad de los ecosistemas y recursos naturales, donde los espacios considerados áreas protegidas albergan los recursos hídricos, provisión de alimentos como los manglares, reservas marinas como por ejemplo Galápagos, son fundamentales para la protección de la biodiversidad. En el país tenemos 59 áreas protegidas de las cuales 53 corresponden a la administración del Estado central, quien tiene la rectoría de la administración del SNAP.
En un momento como el actual, donde necesitamos de reactivación turística que permite cumplir con las medidas de distanciamiento necesarias, invisibilizar un trabajo silencioso pero intenso en su importancia, no es oportuno quizás sea necesario económicamente el recorte de personal pero un sector que cuida y vela por la naturaleza debe ser el último considerado, esperemos que se reconsidere las medidas tomadas y se priorice como se ostenta la conservación.