Sector turístico ajustándose a la bioseguridad
“Cuando abramos nuestras puertas, estaremos preparados para ofrecer un servicio renovado, pensado en brindar experiencias únicas y memorables a nuestros huéspedes, y concebido para garantizar la atención en salud y seguridad que nos demandan las necesidades del momento”, así de esperanzado se muestra el presidente de Decameron Fabio Villegas.
El está convencido que la llegada del coronavirus cambió la forma de ver, disfrutar y atender al turista. Por esa razón, con apoyo de asesores externos especializados, están reforzando las certificaciones en materia de higiene y seguridad. Entre las acciones preventivas que se ajustan a las normas de bioseguridad que exige la emergencia sanitaria, se harán tomas de temperatura y evaluación de síntomas al ingreso de los hoteles; eso incluye a trabajadores de la empresa.
Se diseñaron nuevos modelos de ocupación y uso de zonas comunes como piscinas, playas y áreas de esparcimiento, que garanticen el distanciamiento físico entre personas, para que las familias puedan estar juntas y seguras. En los restaurantes, por ejemplo, se limitarán los aforos.
Desinfección
Se promoverá el lavado constante de manos y se facilitará el acceso a dispositivos especiales para lograrlo. El distanciamiento físico huéspedes y trabajadores, no será un tema menor, sin perder la empatía y cercanía de las partes. Todos usarán tapabocas, la limpieza y desinfección de áreas será parte de la rutina.
Las previsiones van acorde a un posible levantamiento de las medidas restrictivas relacionadas con la semaforización de cada jurisdicción. En el caso de la provincia, Decameron está en Mompiche-Muisne. “Desarrollamos el plan integral de bioseguridad denominado ‘Decameron Health Inclusive’, que contiene protocolos rigurosos y detallados que comprenden todos los aspectos de la experiencia de los huéspedes y los trabajadores”, destaca el presidente de Decameron Fabio Villegas.