Desnutrición infantil sin solución
Mediante la Misión Ternura se espera llegar, a unos 56.000 niños afectados.
Durante el desarrollo de la Segunda Minga Nacional por la Ternura, llevada a cabo ayer, Berenice Cordero, ministra de Inclusión Económica y Social, expresó que la desnutrición crónica infantil es la gran deuda social que tiene el país.
“Enfrentamos un problema estructural duro que no se ha podido superar en la última década. Si no invertimos ahora tendrá consecuencias costosas para la sociedad en ámbitos como retención escolar, desempeño laboral, seguridad y salud”, dijo.
Según estadistas oficiales, desde 2008, el porcentaje de niños de 0 a 5 años con desnutrición crónica se ha estancado. Así, la incidencia no ha variado del 24%, es decir, uno de cada cuatro niños en el país es significativamente más pequeño de lo que debería ser, y presenta un retraso cognitivo significativo como consecuencia de una dieta escasa y pobre en vitaminas esenciales.
Protegiendo a la infancia
Yolanda Lucero, médica y nutricionista, aseveró que la importancia del tema radica en que cuando un niño ya está desnutrido antes de los 5 años, hay una alta probabilidad de que tenga problemas, tanto de salud como cognitivos, durante toda la vida. “Una alta tasa de desnutrición es casi una garantía de que los ciudadanos del futuro no van a tener igualdad de oportunidades”, apuntó.
En este sentido, Cordero afirmó que aparte de la atención prioritaria y cercana que se da a través de los Centros de Desarrollo Infantil y del programa ‘Creciendo con nuestros hijos’, dentro de la Misión Ternura, se está trabajando en una ley de protección de la primera infancia.
El objetivo sería asegurar una protección fiscal efectiva y ciertas medidas de enseñanza para los niños más pequeños.
“La lucha contra la pobreza y la desnutrición crónica es multidimensional, e incluye aspectos como nutrición, estimulación, corresponsabilidad de la familia, cuidado cariñoso. Es decir, un concepto distinto e integral de la educación y cuidado inicial”, puntualizó Cordero.
Sectores rurales, más afectados
El 60% de los niños con desnutrición crónica, y el 71 % de los niños con desnutrición crónica grave, habitan en las áreas rurales, aunque represente solo el 45 % de la población nacional. Además la mayor concentración se da en las áreas de la Sierra Centro, donde el 60 % de los niños tiene desnutrición crónica y el 63 % padece desnutrición crónica extrema.
Esto lo confirmó Cordero, además añadió que aparte de la población indígena, los niños afroecuatorianos también presentan porcentajes altos. “La desnutrición se manifiesta más en provincias de la sierra Centro como Chimborazo, pero también en zonas costeras como Manabí. También se evidencia alta incidencia en zonas marginales de grandes ciudades como Guayaquil, o en las zona rurales cercanas a Quito”, contó. ( JS)
Minga Nacional por la Ternura
Ayer, en todos los Centros de Desarrollo Infantil y en las locaciones del programa ‘Creciendo con nuestros niños’, brigadas de padres y madres de familia, funcionarios del MIES, y personal de los ministerios de Deporte y Salud Pública, se movilizaron para hacer limpieza de materia- les, decoración, arreglo y seguridad de los espacios.
En el Centro de Desarrollo Infantil ‘Carolina Terán’, Ivonne Chicaiza, madre de un niño de 2 años, comentó que se siente feliz de ayudar a mejorar las instalaciones en donde su hijo pasa varias horas al día.
“Vengo con gusto porque aquí le atienden y le dan de comer a mi guagua mientras yo trabajo. Ahora ya no está tan flaquito y es más sociable”, añadió.
Según Berenice Cordero, hasta final del año, entre los centros del MIES y los del programa Misión ternura se espera llegar a más de 350.000 niños, sobre todo de los 96 cantones más pobres del país, qque se consideran los más afectados. ( JS)