ÚLTIMA VISITA
DE BOLÍVAR A ECUADOR
A1827, cansado el Municipio de Guayaquil de los atropellos, decidió no reconocer la autoridad, comenzando por Juan José Flores; fue un intento de separación. La Mar y Elizalde fueron nombrados para ocupar los más altos cargos militares. Este incidente causó una larga guerra entre Colombia y Perú. En 1829, Simón Bolívar decidió ir a Ecuador para retomar Guayaquil y reponer a Flores de máxima autoridad. Sería su último viaje. Llegó a Quito a fines de marzo. Durante su estadía en el país escribió cinco cartas a Joaquín Mosquera Arboleda, jurista, diplomático y político colombiano, su hombre de confianza; había sido presidente del Congreso de Ocaña en 1828. Las cartas se enviaron de Quito, Buijo y Guayaquil, contando lo que sucedía en la última. En ellas se reflejó un Bolívar frustrado, agotado y resignado.
En Quito, 2 de abril, Bolívar despotricó de La Mar, cuando años atrás lo había admirado. Era su estilo, lo mismo pasó con Vicente Rocafuerte, en su primera carta a él, le escribió maravillas, para años después calificarlo de siniestro. Se refirió a una opinión de Sucre, sobre La Mar. Sucre le mencionaba, que estaba “…lleno de frívolas razones […] para violar la fe de los tratados y continuar con la guerra”. Bolívar lo acusó de haber asesinado a muchas personas, incluyendo mujeres y niños; haber incendiado pueblos e incitado a la población de Guayaquil para que tomara las armas. Creía firmemente que la llegada de Flores haría claudicar a Guayaquil, por las buenas o las malas: “El general Flores ha marchado con fuerzas para tomar a Guayaquil, lo que él no podrá verificar hasta fines de mayo, tiempo en
“SI USTED Y LOS MEJORES DIPUTADOS NO ASISTEN SE PERDERÁ TODO COMO EN OCAÑA”, BOLÍVAR A MOSQUERA. 21/9/1829
se secan las aguas. Al momento que él me anuncia la ocupación de aquella ciudad, yo me pondré en marcha para Bogotá, porque mi intención es estar ahí cuanto antes. Estaba convencido de que conseguiría la victoria. Según él la lograría: 1) por la conquista de Guayaquil y la amenaza al Perú, 2) por la llegada de nuestras fuerzas marítimas al Pacífico y 3) por una insurrección combinada de Gamarra con Santa Cruz que manda ya en Bolivia. Esto es casi seguro”. Más tarde le escribió que Santander, que presidía Nueva Granada, había complotado con La Mar y Gamarra para separarse de la Gran Colombia; el primero se nombraría presidente de la República de Ecuador y Gamarra del Perú. Bolívar se expresó de La Mar como traidor, vil y pérfido.
UNA JUNTA DE DISTRITO
Un mes después Bolívar seguía en Quito y el 6 de nuevo escribió a Mosquera que había recibido mucho apoyo desde Perú, incluyendo cartas de mujeres que le pedían que vaya a Lima para hacer una revolución y tomar el poder. Mostró gran optimismo, tomando en cuenta que los peruanos estuvieron entre los primeros en rechazar la Constitución boliviana. En la carta Bolívar le comentó que La Mar no había logrado reforzar a Guayaquil como quería, por falta de apoyo de Gamarra y nunca “…podrá resistir las fuerzas que están y voy aglomerando, cada vez más, en aquella parte, para no sufrir ni un revés parcial. El general Flores, que las manda, lo hace muy bien, y sus avanzadas llegan hasta Guayaquil mismo”. Terminó su comunicación haciéndole conocer que había creado una Junta de Distrito con las personas más capaces “… para ver si puedo hacer algún bien a estos miserables departamentos, mejorándoles al menos su administración”. Posiblemente se refirió a Guayaquil, entre otros. Atacó a la administración, seguramente porque no le gustó la actitud de los miembros del Municipio de nuestra ciudad.
DECRETOS Y PROPUESTA
La próxima carta es del 14 de julio, desde el Buijo, cerca de Guayaquil. El plan de Bolívar de regresar a Bogotá desde Quito, no se cumplió. Subestimó a los guayaquileños. En ella le hizo conocer que estaban por firmar un armisticio con Colombia. Pedro Gual lo representó, lo esperaba en cualquier momento para así recibir la ciudad de los peruanos. La Mar ya se había regresado a Perú, por haber sido elegido presidente. Para el mes de agosto Bolívar estuvo en Guayaquil y aprovechó para firmar varios decretos, entre ellos, los agricultores podían pagar ciertos impuestos con proque ductos que producían, en lugar de moneda. Otro fue la prohibición de importar sal marina para no perjudicar la venta de la sal ecuatoriana. Es en esta fecha que Bolívar ofreció a José Joaquín Olmedo por segunda ocasión el Ministerio de Relaciones Exteriores de Gran Colombia y por segunda ocasión no aceptó. Entre ellos no hubo contacto alguno, la propuesta y la contestación fueron hechas a través del secretario.
En la carta del 3 de septiembre a Mosquera, Bolívar se expresó muy mal de los dirigentes colombianos y venezolanos. Mencionó sobre separar Nueva Granada de Venezuela y crear una federación. Escribió sobre la convocatoria al Congreso en 1830 que había hecho, le manifestó que presentaría su renuncia. Se quejó de sus adversarios: “No quieren monarquía ni vitalicios, menos aún aristocracia, ¿por qué no se ahogan de una vez en el estrepitoso y alegre océano de la
anarquía?” El 22 de septiembre se firmó el Tratado de Guayaquil y partió de esta ciudad.
Joaquín Mosquera.
Carta de Simón Bolívar a Joaquín Mosquera.