El secreto de la villa: estar bien provista
Décadas después, Cascais sigue siendo la zona más cara de Portugal, sin perder ni gota de sofisticación y elegancia, ¿pero qué ofrece que no tengan otros destinos con igual aura cosmopolita?
“Está a 20 km de una capital europea; en un radio de 100 km tiene infraestructuras difíciles de hallar en otra ciudad de Europa: aeródromo, hipódromo, marina, centro de congresos, buena oferta hotelera, buen equipamiento deportivo”, defiende Carlos Carreiras.
Por estar junto al mar y por sus playas, es referencia en deportes náuticos. En su costa se practica velerismo, surf, pesca deportiva, y es sede de campeonatos mundiales de diversas modalidades.
Acoge el Abierto de Estoril, torneo de ATP-250 que recibe a grandes figuras del tenis mundial, e importantes competiciones de hípica y salto ecuestre. Se afianzó también en golf, gracias a sus siete campos de 18 hoyos.
Su oferta cultural se reforzó. En 2015 estrenó el ‘Barrio de los Museos’, modelo importado de capitales como Berlín o Ámsterdam, con 17 equipamientos culturales que permiten la experiencia conjunta de su cultura y el patrimonio. Otra parada del barrio es la ‘Casa das Historias’, de la pintora portuguesa afincada en Reino Unido Paula Rego; el Centro Cultural de Cascais y sus exposiciones; la Cidadela, antigua residencia de verano de la familia real portuguesa; y museos.
El Casino de Estoril es escenario habitual de espectáculos y conciertos de las principales voces del país. El séptimo arte tiene hueco allí con el Festival de Cine de Lisboa y Estoril (Leffest).