Un millón de flores
Una de las bodas más grandes que realizaron requirió de un millón de flores para el regocijo de 1.500 invitados. Ocurrió en septiembre del año pasado y fue la de Gabriela. En ella hubo tres ambientaciones: el área de cocteles tuvo un estilo tropical con entelados dorados y palmas verdes; la mesa de dulces se destacó por simular un jardín con flores fucsias, moradas y doradas; y el área de invitados estuvo repleta de flores blancas. El evento fue tan grande que contaron con la colaboración del diseñador Vásquez. “Trabajamos un año entero. Queríamos demostrar que éramos capaces y valió la pena porque la recepción fue espectacularmente maravillosa”.