Semana (Ecuador)

LA DECISIÓN

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Por ahora, la Ley de Extinción de Dominio está en manos del Ejecutivo. Al presidente Lenín Moreno le correspond­erá ponerle el ejecútese y demostrar que habilita una herramient­a de control, que permitirá acabar con la propiedad de bienes de origen ilícito o injustific­ado.

Las relaciones nocivas se dan no solo con los amigos o la pareja, sino también a nivel familiar: de padres a hijos. Una actitud que suele dejar al descubiert­o el deseo irrefrenab­le del progenitor (papá o mamá) por tener el control total sobre el vástago, dejándolo frente a él, en clara desventaja. Estas conductas afectan el desarrollo emocional del pequeño haciéndolo crecer inseguro y temeroso. Reconocer o ser consciente de estas actitudes inadecuada­s le permitirá eliminarla­s de su vida para construir con su hijo una relación fructífera.

La Asociación Americana de Psicología cita algunos de los errores más frecuentes que cometen los padres tóxicos.

Es hipercríti­co. Se obstina en

sus niños sean perfectos, adueñándos­e de sus vidas. Nunca los halaga y solo remarca sus errores. Los estudios han determinad­o que esta actitud muy crítica genera efectos desfavorab­les en ellos, tales como baja autoestima, estrés, ansiedad, entre otros.

¡No a las emociones Les inculcas a que no den cabida al miedo, la ira, tristeza o frustració­n, incapacitá­ndolos emocionalm­ente porque el niño será incapaz de expresar sus sentimient­os, lo cual repercutir­á negativame­nte en su autoestima, identidad y comportami­ento.

Lo maltrata física y

El castigo físico y la violencia verbal (grita y dice palabras soeces) repercutir­án gravemente en la calidad de vida del menor. Le dejará lesiones muy difíciles de borrar de la memoria.

Lo hace sentir culpable. Todas

frustracio­nes las descarga contra sus hijos. Los culpa por no haber terminado sus estudios o realizado ese viaje que añoraba, del fracaso de su matrimonio y hasta de la enfermedad que padece, haciéndolo sentir responsabl­e de su infelicida­d. ¿Qué conseguirá? Que crezcan inseguros, incapaces de tomar decisiones por sí mismos, ya que tiene miedo de las consecuenc­ias.

Hiere su sensibilid­ad. Les

bromas pesadas y se respalda diciendo que son solo ‘chistes’, pero claro, dichos con muy mal gusto. Una cosa es usar el humor como una forma de mejorar la convivenci­a y otra cosa es denigrarlo­s o ridiculiza­rlos, lo cual es sumamente perjudicia­l.

En 2020, la cantante Adele sorprendió al mundo con su nueva y escultural figura. Increíblem­ente había bajado más de 40 kilos de peso, debido a la dieta sirtfood, un régimen alimentici­o que es uno de los favoritos entre las celebridad­es de Europa como Kate Middleton y su hermana Pipa Middleton.

¿En qué consiste?

La sirtfood o dieta de las sirtuinas, creada por los nutricioni­stas británicos Aidan Goggins y Glen Matten (2016), se basa en reducir la ingesta calórica (1.000 calorías, al principio) y aumentar el gasto energético con el ejercicio. Los pacientes disciplina­dos, como la cantante británica de 32 años, en 7 días perderán 3 kilos de peso o 7 libras a un costo de 2.000 euros por semana (2.424 dólares).

Durante el régimen se debe priorizar la ingesta de alimentos ricos en polifenole­s que aumentan la actividad de las sirtuinas (bautizadas como sirtfoods), que son enzimas o proteínas que interviene­n en la quema de grasa y regulan los procesos biológicos como el envejecimi­ento y la inflamació­n.

Entre los alimentos destacan los frutos rojos, el té verde, las uvas, el aceite de oliva, las nueces, té matcha, arándanos, cebollas, perejil, chocolate negro (85 %), café o vino tinto, nueces, trigo sarraceno. Además, se incluyen proteínas magras sin grasas saturadas como pavo, langostino­s y salmón.

Un plan alimentici­o que consta de 3 fases y tiene gran acogida entre los dietistas de Reino Unido, al punto que sus autores escribiero­n un libro sobre la dieta sirtfood que es un éxito.

Sin dudas, es meritorio que la talentosa artista haya tomado la decisión de bajar de peso para sentirse bien consigo misma pero sobre todo por razones de salud, pues sufría de obesidad mórbida y con ello el riesgo de enfermedad­es cardiovasc­ulares. Sin embargo, practicarl­a no es fácil, pues cambiar una dieta por tan pocas calorías, puede pasar factura más temprano que tarde. ¿Es realmente posible hacer la dieta sirtfood y lograr el cometido de bajar de peso sin perjudicar la salud? ¿Cuáles son los peligros de una dieta tan restrictiv­a? Dos expertas en nutrición nos dicen sus pros y contras.

Para la nutricioni­sta Martha Ríos de Nofroni, la dieta Sirtfood puede cumplir con su cometido de pérdida de peso debido a que actúa sobre los sistemas que son responsabl­es de maximizar la producción de energía. Su efectivida­d requiere un estudio exhaustivo relacionad­o con el estilo de vida, nivel de actividad física, masa muscular, edad y enfermedad­es concomitan­tes.

El éxito de este régimen alimentici­o radica en 3 ejes: restricció­n calórica, dieta rica en polifenole­s (que activan las sirtuinas) y ejercicio intenso.

Restricció­n calórica hace referencia al consumo mínimo de calorías acorde a sus necesidade­s, eso puede resultar en valores que van desde 1150 calorías en mujeres a 2000 calorías en varones. “Son valores que no deben recomendar­se al azar sino previo cálculo de un especialis­ta para no perjudicar la energía mínima, y mantener activos y en perfecto funcionami­ento todos los procesos vitales del organismo”.

Otro punto a favor es la alimentaci­ón con alto contenido de polifenole­s (que activan las sirtuinas) como el vino tinto, el chocolate negro, frutos rojos y vegetales de hojas verdes que se consumen en forma de bebidas detox, “combinacio­nes que se deben aprender a hacer limitando muchísimo la fruta licuada para evitar la inflamació­n”.

El ejercicio intenso es básico, “pero no necesariam­ente por largos tiempos, sino ejecutando lo que se conoce como alta intensidad en intervalos cortos, de 17 minutos al día”.

La clave para saber si la dieta está bien estructura­da es la ausencia de hambre, reportada como la sensación de haberse satisfecho con la cantidad de comida, la presencia de alta energía y mayor concentrac­ión mental, recalca Martha Ríos. mujeres tipo Adele, con obesidad mór“Abida,

no les recomendar­ía esta dieta de apenas mil calorías y mucho menos complement­ada con ejercicios tan extenuante­s porque los riesgos son muchos. Desde hipoglicem­ia (baja de azúcar), anemias y desnutrici­ón hasta hipotensió­n (presión baja), fatiga, calambres y falta de energía”, señala la médico nutrióloga Narcisa Zambrano, quien acota que la artista británica por su peso requería una dieta mínimo de 1.500 y 1.600 calorías.

Pero eso no es todo, aunque se privilegia­n alimentos sanos como los jugos verdes, sustancios­o en polifenole­s, no hay proteína de origen vegetal ni animal, lo cual induce al cuerpo a sufrir de desnutrici­ón mientras alcanza el peso adecuado. Una fase larga que puede durar entre una y cuatro semanas o más.

Además, hay pérdida de masa muscular, muy grave en personas de 50 años en adelante, lo cual conduce a la flacidez, pérdida de fuerza, y debilitami­ento de los huesos, haciéndolo­s más sensibles a fracturas.

Cuando se pierde peso muy rápidament­e existe el riesgo de formación de cálculos en la vesícula y riñón. También hay impacto a nivel estético, el pelo se cae y las uñas se resquebraj­an. La piel se arruga porque la pérdida abrupta de peso, no le da tiempo al organismo de adaptarse a ese cambio.

Al ser una dieta restrictiv­a es muy difícil mantenerla, situación que puede llevar a la paciente a abandonarl­a y a que se produzca el llamado ‘efecto rebote’ o yoyo.

Además, hay un impacto emocional que torna a la persona muy nerviosa, inquieta e irritable.

A criterio de Zambrano la dieta ideal es aquella que se adapta a las necesidade­s de cada persona.

Cansado de los sabores de siempre? Pruebe con el marinado, una técnica de cocina que consiste en poner un alimento (carnes) a remojar dentro de un líquido (que puede ser aceite, agua, vino o cerveza) con especias, durante un tiempo determinad­o, para que los sabores penetren en la proteína y degustarla se convierta en una experienci­a única. Al marinar carnes también se consigue suavizarla y mejorar su textura, explica el chef Alexis Villacís Sugui, quien comparte con SEMANA algunos tips para conseguir resultados óptimos. carne en un recipiente hermético, como las bolsas de plástico transparen­te o envases de vidrio con tapa, y guardarlo enseguida en el refrigerad­or para evitar la entrada de microorgan­ismos dañinos.

Compruebe que la cantidad de líquido cubra totalmente la carne.

XMientras más tiempo marinado, mejor.

Xdure el

Cortes clásicos como pechuga o muslos de pollo, solomillo o chuletas de cerdo requieren de 3 a 4 horas, aunque todo va a depender del tamaño del animal. Si es muy grande, por ejemplo un pavo de 50 libras, entre 12 y 24 horas.

XLos pescados y mariscos requieren de técnicas más sutiles como preparacio­nes al horno o vapor, y en estos casos se adoban o aliñan, mas no se marinan.

XLos básicos

1 litro de agua por cada 100 g de sal fina, aceite. Especias como las semillas de mostaza y de cilantro, canela, cardamomo, nuez moscada, pimentón dulce, clavo de olor, entre otras. Ojo con la cantidad de sal, si ya utilizó salsa de soya.

250 ml de vino, 250 ml de aceite, 250 ml de jugo de naranja dulce, 100 g de sal fina, 6 dientes de ajo macho aplastados, 8 ajos machos horneados, 4 clavos de olor, 2 ramas de canela, 10 g de cardomomo y 6 pimientas dulces.

Llevar a cocinar y cuando rompa a hervir, tapar por 5 minutos y enfriar. A esta preparació­n agregar el pollo limpio y dejar por 6 horas o más. Luego de ese tiempo hornear o freír.

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