Yaku Warmi, oasis del bienestar
Este sorprendente paraíso, ubicado en la AMAZONÍA ECUATORIANA, es el sitio perfecto para el encuentro entre el ser y la naturaleza
“H ay que vivirlo para contarlo”, es la frase que encaja a la perfección para referirse a Yaku Warmi, destino turístico ecuatoriano donde el canto de las aves es música para los oídos cuando amanece. Este sector de la provincia amazónica de Orellana es una reserva ecológica que tiene 20 mil hectáreas de bosque primario, de las cuales el 60 % es zona intangible, es decir, espacios protegidos de excepcional importancia cultural.
“Este centro turístico está a cargo de 150 familias aproximadamente, encargadas de elegir a los administradores, que han visto en el ecoturismo una forma de vida y gran alternativa a la explotación petrolera”, dice Augusto Coquinche, uno de los administradores.
Trasladarse en bote es la mejor alternativa para llegar rápido; también puede hacerlo en canoa, surcando el majestuoso río Napo, pero le tomará varios días. La travesía en una pequeña nave con dos motores se tarda desde el puerto en El Coca siete horas aproximadamente y el costo del pasaje es de 37 dólares (solo de ida), si va por cuenta propia; existe la opción de adquirir los paquetes promocionales.
Cuando llega al destino, todos los problemas se olvidan. El intenso verdor de la selva amazónica se mezcla con los tonos azules y marrones del cielo y los ríos. Así como el sol calienta muy fuerte, la furia de la lluvia también asalta de imprevisto.
En Yaku Warmi, cuyo significado en español es `Mujer del Agua', la conexión es entre el ser y la naturaleza. El centro turístico forma parte de los parques naturales más importantes del planeta, como son el Yasuní y el Cuyabeno.
El amanecer es de ensueño y el ocaso indescriptible. El armónico trino de las aves le dan la bienve
nida a cada día y cuando aparece el arcoíris el cielo se torna multicolor. Vaya preparado con ropa fresca y mucha agua. Durante el recorrido por los senderos, ya sea por tierra o por los ríos, se encontrará con diferentes especies de flora y fauna; y si está en paz podrá observar especies silvestres únicas en el planeta. A Yaku Warmi se va con el espíritu dispuesto a dejarse sorprender por la madre naturaleza.