SOSPECHAN QUE ESCENA DE ACCIDENTE FUE ALTERADA
Motorista de CAPRES permanecerá detenido por muerte de abogado. Querella señala manipulación y FGR investigará.
El Juzgado Segundo de Paz de Soyapango envió a prisión preventiva al sargento y motorista de Casa Presidencial (CAPRES) Víctor Manuel Urías, mientras la Fiscalía General de la República (FGR) continúa investigando, por cuatro meses más, cómo ocurrió el accidente en el que falleció José Rafael Zelaya, de 48 años, quien era notificador de la Secretaría General de la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
Urías fue acusado por la Fiscalía del delito de homicidio culposo, después de que el viernes pasado, en horas de la noche, huyó luego de arrollar a Zelaya con un pick up doble cabina con placas particulares 640-743, asignado a Casa Presidencial.
“Él pudo no haber quedado detenido, pero quedó detenido porque huyó”, dijo ayer la fiscal del caso al salir de la audiencia inicial.
El juzgado determinó que el imputado deberá permanecer en prisión en el Estado Mayor, al igual que el jefe de personal del Batallón Presidencial acusado de ordenar mover la camioneta de un accidente que ocurrió el 1.º de mayo de 2016.
La fiscal del caso informó que existe la posibilidad de que dentro de los cuatro meses de instrucción investiguen si hubo alteración de la escena, ya que los documentos de identificación de Zelaya no fueron encontrados cuando las autoridades realizaron el levantamiento del cadáver en el bulevar del Ejército, a la altura de la zona comercial de Soyapango. La esposa de Zelaya aseguró que él siempre portaba documentos de identificación y que le parecía raro que en la noche del accidente las autoridades no lo identificaron bajo el argumento de que no tenía sus papeles.
María José Castro, querellante del caso, sospecha que las autoridades hicieron creer que se trataba de un indigente para no revelar la identidad de la víctima. “La hipótesis que nosotros tenemos es que ellos dijeron que se trataba de un indigente, pero como que si ellos no son personas como nosotros, para minimizar la situación”, comentó la abogada, quien además señaló que la familia de Zelaya no le ha informado si aceptará conciliar.
El ministro de la Defensa Nacional, David Mun- guía Payés, afirmó que el personal del Batallón Presidencial no alteró la escena y que Urías enfrenta la justicia por un accidente en el que “puede estar involucrado cualquier persona”.
“Esto fue un accidente. El motorista que se vio involucrado está a la orden de la justicia y no podemos hacer más que la justicia resuelva. Esto es un accidente que le puede suceder a cualquier persona”, declaró ayer el ministro.
Por su parte, el vocero del Gobierno, Eugenio Chicas, quien el sábado dijo que el motorista de CAPRES había atropellado a un indigente que no utilizó la pasarela, se disculpó este martes, a través de su cuenta de Twitter, por haber puesto un “inapropiado calificativo a la víctima”.
DOS CASOS DOS EMPLEADOS DE CASA PRESIDENCIAL INVOLUCRADOS EN ACCIDENTES DE TRÁNSITO PERMANECEN DETENIDOS EN EL ESTADO MAYOR PRESIDENCIAL: UNO DE ELLOS GIRÓ LA ORDEN DE MOVER UNA CAMIONETA QUE PROVOCÓ LA MUERTE DE UN HOMBRE EN 2016.
familiar cercano”, dijo el joven. Sin embargo, no fueron ese día.
La esposa de Zelaya trabaja en Medicina Legal y el lunes por la tarde llegó a la sección de personas desaparecidas. La señora dio el nombre y la descripción de su esposo y el personal le mostró varias fotografías. A la señora le dio la impresión de que una de esas personas era su esposo, pero por los golpes se le hizo muy difícil reconocerlo. Decidió llegar hasta la morgue para comprobar si se trataba de su esposo, pero, según su sobrino, le impidieron el acceso a pesar de que ella labora allí. “No la querían dejar ingresar a la zona de la morgue, por lo que tuvo que esperar y buscar a la Fiscalía para que se hiciera posible acceso”, dijo el joven.
Después de una hora, le mostraron el cadáver desnudo del hombre que apareció en la fotografía; reconoció que era su esposo por una cicatriz. Más familiares pudieron ingresar y todos comprobaron que se trataba del abogado Zelaya. Si la esposa de la víctima se hubiera tardado un día más en realizar el reconocimiento, la víctima hubiera sido sepultada en una fosa común.
“Nosotros nos dimos cuenta de que alguien murió atropellado, pero nunca pensamos que ‘ese indigente’ era mi tío”, relató el sobrino.
Los familiares de Zelaya aseguraron que todo el tiempo portaba sus documentos de identificación. Sobre todo ese día que tenía que ir hacer las diligencias. Se cuestionan qué pasó con los documentos personales y su ropa, ya que no les regresaron nada.
La fiscal del caso explicó ayer, previo a la audiencia inicial contra el motorista de CAPRES involucrado, que existen muchas hipótesis sobre qué pasó con los documentos. Ella manifestó que se los pudieron haber robado, los pudo haber perdido o alguien decidió ocultarlos luego del accidente. Sin embargo, aún no han determinado si hubo alteración de la escena del accidente.
María José Castro, querellante (acusadora particular) del caso, dijo que la defensa trató de ocultar la identidad de la víctima. “Primero el señor (Eugenio) Chicas dijo que era un indigente, como que no se tratara de una persona. Luego los abogados dijeron que era una persona deportada porque vestía una camisa azul y pantalón de marca”, afirmó.
El sobrino del abogado también reaccionó ante las declaraciones del vocero de la Presidencia diciendo que Chicas no debió expresarse así de su tío “y tampoco ver de menos a una persona indigente”.
Víctor Manuel Urías, el motorista del Batallón Presidencial, deberá permanecer en prisión temporal cuatro meses.