“improteatral”.
El Festival Centroamericano de Comedia vuelve recargado de nuevos comediantes y nuevas propuestas humorísticas. En él desfilarán muchas estrellas del stand-up comedy y del
Las risas, emociones y sorpresas estarán presentes por tercera vez consecutiva en el país durante el Festival Centroamericano de Comedia que se desarrollará del martes 25 al domingo 30 abril en el Teatro Luis Poma y que contará con la participación de comediantes de Costa Rica, Guatemala, Honduras y El Salvador.
La nueva edición del festival parte con algunas variantes. Por ejemplo, el grupo de Nicaragua no estará presente (en los dos anteriores participó). Según Fernando Rodríguez, comediante salvadoreño y organizador del festival, los “nicas” se encuentran en un proceso de reconstrucción. Además, en esta ocasión Honduras no vendrá con los “cuenta cuentos”, sino que traerá un grupo de stand-up comedy Programación
Fecha: 25, 26, 27, 28, 29 y 30 de abril Hora: 8 p. m. (todos los días). Además, sábado habrá función a las 5 p. m. Lugar: Teatro Luis Poma Entrada: $7 que acompañará al resto de países del viernes 28 al domingo 30 de abril.
“El grupo de Honduras está creciendo y es un grupo que tiene muy poco de estar, pero lo está haciendo muy bien y queremos apoyarlos. Además, este contacto internacional es vital para todos. A nosotros nos ha hecho crecer y creo que ha hecho crecer a la región”, expresó Rodríguez. Asimismo, Costa Rica trae su arsenal humorístico liderado por el comediante Pablo Montoya, Daniel Ugalde y “Chavalazo” López.
Por su parte, el grupo de stand-up comedy de El Salvador, integrado por Fernando Rodríguez, Kelly Iraheta, Bryan Hernández, Gabriela Rivera, Roberto Reyes, Rebeca González, Cristian Mejía, Luis Zúniga y Fercho Marroquín, ha preparado una introducción especial para robarse la noche y complacer al público salvadoreño.
“El propósito de este año es tener este festival y poderlo vender a las regiones aledañas; es decir, tener un circuito permanente de stand up en la región y que puedan ir un combinado de cuatro comediantes de cada país (por poner un ejemplo) a presentarse fuera de la región centroamericana”, explicó el organizador.
EXIGENCIA Y CRECIMIENTO
“El plus del festival es que podamos mostrar el crecimiento que ha tenido cada grupo, además de traer nuevos comediantes de los países que han participado antes”. FERNANDO RODRÍGUEZ,
Becario de la Academia Salvadoreña de la Lengua (MAEC-AECID) Para consultas, escriba a quodnaturanondat@gmail.com
El comediante también reveló que el público ha crecido en los últimos años y que desde temprano abarrota las entradas a las funciones. Además, se ha vuelto más exigente y ha sido capaz de señalarles las áreas donde deben mejorar edición tras edición.
El Festival Centroamericano de Comedia se realizó por primera vez en 2015 y sirvió para que los comediantes dieran a conocer su talento en la región y les abrieran las puertas en otros países cercanos.
“Cuando comencé esto me decían ‘nombre, aquí nadie sabe qué es’. Pero ahora ya me piden el show, cuando antes ni sabían qué era. Eso es un gran logro, es una maravilla para mí”, reconoció Rodríguez. Hace más de veinte años fui a una agencia bancaria a “abrir” una cuenta de ahorros. Era un sábado por la mañana. Cuando llegó mi turno, una joven me atendió y me preguntó: “¿Con cuánto dinero va a ‘aperturar’ su cuenta?”. No recuerdo el monto, pero sí que me dolió la nuca. Era la primera vez que oía esa palabra y, además de incómoda, me parecía absolutamente innecesaria... y me lo sigue pareciendo.
El Diccionario de la lengua española (2014) no la recoge. Si uno la busca, encontrará solamente apertura (“acción de abrir”), nombre del que se deriva el verbo en cuestión. Sí la registra, en cambio, el Diccionario Clave (2014), que afirma: “En el lenguaje bancario, referido a una cuenta, abrirla: El cajero me explicó lo que tenía que hacer para aperturar una cuenta corriente”. Pero advierte: “Su uso es innecesario y puede sustituirse por abrir”.
Curiosamente, el Diccionario panhispánico de dudas (DPD) cita una nota del periódico peruano El Comercio, del 14 de enero de 1975, que informa: “Ayer domingo la Cooperativa Agraria de Producción Casa Grande aperturó sus Terceros Juegos de Verano” y otra más reciente, del 8 de julio de 1997, del ecuatoriano Diario Hoy, que dice: “Ordeno que esos contenedores sean aperturados y revisados”. En ambos casos, aperturar se ha empleado como sinónimo de abrir, pero en ámbitos totalmente distintos. En todo caso, el DPD también observa: “Su uso no está justificado y debe evitarse”.
Quizás, entonces, el citado verbo no proceda del lenguaje bancario, pero sí es el que más lo usa. Insisto: si ya existe abrir, ¿para qué aperturar?