Cambio climático: un nuevo reto a enfrentar
Los fenómenos extremos en el clima afectan desde hace varios años a la producción agrícola en El Salvador, que es ahora más vulnerable.
La producción agrícola en El Salvador ha sufrido ya los embates del cambio climático. Diferentes estudios han establecido que en los próximos años este fenómeno global incidirá en la producción de alimentos. Incluso no se descarta que la producción de granos como el maíz y frijol desciendan. Cultivos como el café ahora son más susceptibles a plagas como la roya.
Para el sector agrícola este es uno de los temas que se suma a retos estructurales que afectan al sector, como el acceso al financiamiento, la tenencia de la tierra y el acceso a tecnología, entre otros.
“La agricultura es uno de los sectores en todos los países, por las diversas circunstancias climáticas, con muchas vulnerabilidades. El clima es un reto importante que hay que enfrentar”, apuntó Gustavo Moreno, director ejecutivo de la Asociación de Proveedores Agrícolas (APA).
Ante este panorama, indicó Moreno, se debe apostar por más conocimientos para el agricultor para enfrentar las plagas, como por ejemplo, el acceso a semilla de mejor calidad. En El Salvador, fenómenos como la sequía han impactado a sectores como la ganadería. Fenómenos extremos como las lluvias intensas han afectado la producción agrícola en años recientes. De acuerdo con Yerania Sánchez, oficial economista de la oficina subregional para Mesoamérica de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la presión está sobre la capacidad de los sistemas agroalimentarios de poder satisfacer una demanda creciente y en los productores, que están en contacto directo con las tierras.
La organización prevé que para 2100 el rendimiento del frijol podría bajar entre 1 % y 98 % según cada departamento del país, el más afectado sería La Unión. Por otro lado, en el caso del maíz, las caídas podrían ser entre 11 % y 47 %. La zona más afectada sería, en ambos casos, oriente.
El cambio climático ha generado pérdidas millonarias a la agricultura del país desde hace décadas. Entre 1998 y 2015, El Salvador enfrentó al menos ocho fenómenos climáticos extremos que causaron pérdidas que ascienden a $486 millones, según datos proporcionados por el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG). Solo entre 2012 y 2015 hubo $186 millones en pérdidas que afectaron la producción de granos básicos, en maíz y sorgo.