15dejulio de2018
Mañana estaremos a un año de que cuatro magistrados de la Sala de lo Constitucional y una de la Sala de lo Civil culminen su período de funciones de nueve años. Ese día, el 15 de julio de 2018, ya deberían estar electos sus sucesores, quienes deberán tomar posesión de sus cargos en la Corte Suprema de Justicia (CSJ) el día siguiente, 16 de julio. Estas fechas y los distintos acontecimientos que se darán previamente los debemos tener muy presentes desde ya los que creemos en la democracia.
Todas las elecciones de magistrados de la CSJ son de gran importancia para los derechos de los ciudadanos; sin embargo, la de 2018 es especialmente crucial. En primer lugar, porque se elegirá prácticamente a una nueva Sala de lo Constitucional, máximo intérprete de la Constitución, necesaria para la defensa de los derechos fundamentales y para frenar los abusos de poder; y en segundo lugar, porque se deben evitar retrocesos y deterioros en la calidad de la justicia constitucional, lo que implica que debe mantenerse independiente de los partidos políticos.
El proceso arrancará cuando el CNJ publique el Registro de Abogados Elegibles, lo cual debe suceder 180 días antes de iniciar el período de los nuevos magistrados, a más tardar el 17 de enero de 2018. Posteriormente, las asociaciones de abogados inscribirán a sus precandidatos para participar en la elección que organizará la FEDAES, en febrero o marzo de 2018 y a partir de cuyos resultados remitirá al CNJ el listado de los 15 más votados. Luego, el CNJ hará su propia selección de 15 y remitirá a la Asamblea Legislativa el listado consolidado de 30 candidatos a magistrados de la CSJ, al menos 60 días antes de que tomen posesión los nuevos magistrados, es decir, a más tardar el 17 de mayo de 2018. Finalmente, la nueva Asamblea Legislativa con un mínimo de 56 votos deberá elegir a los 5 magistrados de la CSJ al menos 15 días antes de la toma de posesión de los nuevos, es decir, del 1 de julio de 2018.
Existen varios riesgos. Uno de ellos es que se irrespeten los plazos y se retrase la elección de la CSJ, generando una acefalía o vacío en la justicia constitucional y los ciudadanos no tengamos a quien acudir por la violación de nuestros derechos fundamentales. Recordemos que últimamente el rasgo común en elecciones de funcionarios en la Asamblea Legislativa ha sido el retraso, al punto que en la elección del CNJ en 2017 este fue de un año. Otro riesgo es que se quiera controlar políticamente a la Sala de lo Constitucional y se reviertan o disminuyan avances democráticos, tales como el voto por rostro y las listas abiertas, las candidaturas independientes, el acceso a la información pública, la libertad de expresión y la despartidización en las elecciones de segundo grado de funcionarios.
La ciudadanía debe estar muy atenta durante todo el proceso de elección de magistrados de la CSJ que iniciará pronto y exigir a la FEDAES, al CNJ y a los diputados de la próxima legislatura que tomen sus decisiones pensando en los intereses de los salvadoreños, pues en sus manos estará la responsabilidad histórica de conducir un proceso en tiempo, pulcro y transparente, que finalice en la elección de magistrados que tengan un perfil de idoneidad, independencia y honorabilidad. Ojalá que después de este ciclo que se cierra en la Sala de lo Constitucional el 15 de julio de 2018, se continúe con uno que de igual forma se caracterice por su independencia y por defender los derechos fundamentales.